Page avisa sobre Catalaña: "Si alguien quiere cambiar sentimientos por dinero, aquí sentimos todos"

EUROPA PRESS 18/10/2017 13:37

Desde las Cortes castellano-manchegas, García-Page ha rechazado que se trate la situación de Cataluña "como un mercado", porque no es "institucionalmente aceptable" al tiempo que ha prometido que va a avalar la "respuesta de las instituciones del Estado" hasta el punto de callarse aspectos que "no comparte".

El presidente autonómico ha lanzado una segunda advertencia señalando que la situación catalana hace que solo se hable de ello, por lo que no hay que obviar "que sigue habiendo vida y problemas", como por ejemplo la autorización de trasvases "ilegales" por parte del Gobierno central.

"NO REPROBAR ANTES DE TIEMPO"

En esta línea, García-Page ha indicado que su actitud de lealtad al planteamiento del Estado pasa por callarse las cosas que él haría de otra manera y por "no hacer ningún tipo de reprobación antes de tiempo", porque la "la situación es tan de emergencia" que hay que tener una posición "firme y clara".

En este punto, ha aconsejado al Gobierno central que tenga "mano izquierda", aunque hay gente que esté pidiendo "mano derecha", porque en este caso, según ha afirmado, "hay que tenerla para no resquebrajar los hilos conductores con la sociedad catalana".

Por ello, ha rechazado la actitud de "los beneficios que da ser presidente de Cataluña" y emplear "los poderes de la Constitución para intentar socavar y destrozarla". "Es absurdo negar a la madre".

"La soberanía nacional es indiscutible. No vamos a estar de brazos cruzados", ha avisado García-Page, que se ha mostrado partidario por "el derecho a decidir" y ha abogado por "un argumento de esperanza y clarificación", con un sentimiento de optimismo de fondo.

"CLAVES DEL PASADO CON IDEAS NUEVAS"

Tras destacar que los últimos 40 años han sido el mayor periodo de paz, ha puesto en valor que "la transición fue trascendente" para superar retos, por lo que ha apostado por un "planteamiento que pase por claves del pasado con ideas nuevas". "Estos 40 años los hemos protagonizado entre todos, no es cosa de un 'mandamás' ni un 'mandamenos'", ha aseverado.

Como reflexión, ha explicado que en el conflicto catalán hay que tener claro "tres ritmos: el primero de corto plazo, un segundo en el medio plazo y un tercer plazo" de mayor duración. "Ante el órdago planteado, hay que tener claro el debate de cómo hemos llegado hasta aquí, en qué medida hablamos de nuestra Carta constitucional y recomponer la convivencia entre los ciudadanos de España", ha asegurado.