Mariano Rajoy tiene prisa. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha planteado este lunes la necesidad de contar "a la mayor celeridad posible" con un Gobierno que esté dotado de "estabilidad" para lo que sugerido alcanzar "un acuerdo al menos de mínimos", en el que se incluyan los "grandes objetivos para los próximos años" y "aparcar" los temas en los que haya "discrepancias". Rajoy ha remarcado que estos grandes objetivos deben estar "dentro del marco constitucional".
Este gobierno, según Rajoy, debe formarse "a la mayor celeridad posible", y además debe "poder gobernar". Para ello, ha dicho, "hay que acordar entre todos los grandes objetivos para los próximos años" y ha recalcado que estos "objetivos" deben estar "dentro del marco constitucional".
Para lograr algunos de estos objetivos ha considerado necesario que haya "un acuerdo" y ha citado, en primer lugar, los Presupuestos Generales del Estado para 2017, seguidos de: el techo de gasto, el cumplimiento de todos los compromisos europeos y "dotar al Gobierno de la mayor estabilidad posible". En esta línea ha propuesto "pactar un acuerdo al menos de mínimos para el funcionamiento normal de ese Gobierno en el Parlamento".
En el resto, admitió que tendrán que "poner en común" aquello en lo que esté de acuerdo con las otras fuerzas políticas y "aparcar" aquellos temas en los que haya "discrepancias".
Las prisas de Rajoy no son las del PP
A pesar de la urgencia de Mariano Rajoy, el vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado, aseguraba posteriormente que su partido no quiere "presionar" al PSOE, que "tendrá sus plazos" y sus "trámites" para lograr un "consenso" en sus federaciones ante el Comité Federal que esa formación celebra el día 9 de julio. Sin embargo, ha apelado a la "responsabilidad" de los socialistas para que haya pronto un gobierno, ya que, según ha recalcado, "en cualquiera de las opciones es el que tiene la capacidad de desbloquear".
Casado ha explicado que puede haber "un acuerdo para la investidura" como el que tuvo José Luis Rodríguez Zapatero en 2008, un "acuerdo de legislatura" como el que se logró con José María Aznar en 1996 o bien alcanzar un "acuerdo de gobierno en las distintas modalidades y variaciones que puede tener".
"Pero no queremos presionar ni al PSOE ni al Comité Federal ni a su secretario general, que evidentemente tendrá sus plazos y sus propios trámites para lograr el consenso de las federaciones o de la dirección federal. Simplemente apelamos a la responsabilidad que este partido ha tenido en circunstancias muy importantes en la historia reciente de nuestro país", ha manifestado, para confiar en que los socialistas maticen ahora las declaraciones que hicieron tras el 26J rechazando apoyar al PP.
"No nos han informado de ningún contacto en concreto"
El responsable de Comunicación del Partido Popular ha señalado que su partido quiere un acuerdo de "base amplía, a ser posible con el PSOE y Ciudadanos". Con ese objetivo, ha dicho que tienden la "mano" y esperan "generosidad, altura de miras y luces largas", dado que todos están de acuerdo en que no puede haber unas terceras elecciones en España. "Y eso pasa por la abstención o el respaldo del PSOE", ha abundado.
Tras subrayar que Mariano Rajoy tiene un "reconocido talante negociador, dialogante y pactista", Casado ha reconocido que en la reunión del comité de dirección del PP el jefe del Ejecutivo no les ha "informado de que haya ningún contacto en concreto". Por lo pronto, el presidente del Gobierno en funciones se reúne este martes con responsables de Coalición Canaria en el Palacio de la Moncloa.
El PSOE seguirá diciendo no a Rajoy
Los socialistas han respondido al mensaje del PP reiterándoles que el PSOE no facilitará la investidura de Mariano Rajoy, además de no entender por qué el líder del PP quiere esperar al Comité Federal para llamar al líder de los socialistas, Pedro Sánchez, ya que su posición seguirá siendo la misma.
Según fuentes socialistas, el secretario general del PSOE está dispuesto a reunirse con el líder del PP pero le recomienda que, cuando llegue ese encuentro, tenga ya una mayoría articulada con sus "afines ideológicos", porque "no puede contar" con los socialistas para seguir en La Moncloa.
De hecho, defienden que "no se entiende" que, una semana después de las elecciones del 26 de junio, su única cita política sea con Coalición Canaria. Mañana recibirá en Moncloa al presidente del Gobierno canario, Fernando Clavijo, y al secretario general del partido, José Miguel Barragán.
Desde Ferraz, se anima así a Rajoy a "no dilatar más" estas negociaciones y a ponerse manos a la obra en la búsqueda de esa mayoría alternativa, en la que los socialistas creen que debería mirar a Ciudadanos y a partidos nacionalistas de derechas.
Sánchez le dirá que no
Porque lo que debe tener claro es que el PSOE y su secretario general le van a "decir que no". De esta manera, la dirección socialista descarta que vaya a haber cambios significativos en el próximo Comité Federal, que se reunirá el próximo sábado por primera vez después de las elecciones del 26 de junio.
Ese día, Sánchez se dirigirá a sus compañeros, después de haber hablado durante esta semana con los dirigentes territoriales del partido para recabar su opinión sobre el escenario político abierto después de los últimos comicios.
Por el momento, existe práctica unanimidad en el PSOE en no facilitar el gobierno a Rajoy. El único 'barón' que se ha manifestado favorable a permitir esa investidura ha sido el presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, que el mismo lunes después de las elecciones abogó por permitir gobernar al PP y después defendió una "abstención mínima", es decir, con el número de diputados "estrictamente imprescindible" para que salga adelante.
Por eso, el PSOE no entiende que el PP espere a esa cita para llamar a Sánchez. Este lunes, el vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado, ha sugerido que Rajoy esperará a que pase ese cónclave para ponerse en contacto con el líder de los socialistas.