Tras la reunión mantenida con el Rey Felipe VI como parte de la tercera y última ronda de consultas con los partidos con representación parlamentaria, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez , ha confirmado que los ciudadanos españoles "estamos abocados a unas nuevas elecciones", culpando a Mariano Rajoy y Pablo Iglesias de un "doble bloqueo" para alcanzar acuerdos.
Tras agradecer el trabajo de los medios de comunicación, del Rey Felipe VI, "por contribuir a que esa labor de neutralidad ayudara a arrojar luz en este momento complejo", a Coalición Canaria, Ciudadanos y el pacto firmado pese a que sean "fuerzas políticas diferentes", así como a todos los diputados del PSOE, Pedro Sánchez ha anunciado que "estamos abocados a unas nuevas elecciones".
"Le he contado que no cuento con más de 131 escaños y por tanto es insuficiente para desbloquear la situación. En consecuencia ni puedo ni debo someterme a una nueva investidura en el Congreso. Con toda probabilidad ya no se tramitará ninguna propuesta de candidato y quedamos abocados a unas nuevas elecciones. Lo que la inmensa mayoría de los españoles no queríamos".
'ACUERDO DEL PRADO'
En este sentido, dio las gracias también a Compromis por su propuesta de gobierno 'in extremis' para intentar "que no se repitieran las elecciones y que hubiera un gobierno de cambio que pusiera fin a las políticas del señor Rajoy", añadiendo que "el Partido Socialista ha dicho sí literalmente a 27 de las 30 medidas y hemos propuesto matizaciones a las otras 3".
Sin embargo, acusa a Iglesias de "cerrar la puerta" y afirma que "los vetos nominales han podido al cambio", subrayando que si bien hay un "amplio consenso" sobre las políticas que se han de poner en marcha, "desgraciadamente" los "sillones" han "vetado" el cambio en España. "Nosotros acordamos 200 medidas con Albert Rivera, aceptamos 18 de las 20 medidas de Iglesias y hoy hemos dicho sí a 27 de las 30 de Compromís, pero a todo Iglesias ha dicho que no --ha subrayado--. Incluso cuando he planteado un gobierno socialista con independientes de reconocido prestigio".
"DOBLE BLOQUEO RAJOY-IGLESIAS"
Así, Sánchez ha censurado que el secretario general de la formación morada haya "primado" sus sillones porque "nunca quiso ver a un socialista al frente del Gobierno", una situación que no entiende porque el "bloqueo" institucional no va en contra del PSOE o de su persona, sino en contra de la recuperación del país.
"En estos cuatro meses la política ha sufrido un doble bloqueo: el del señor Rajoy y el del señor Iglesias. El de Rajoy lo entiendo. El de Iglesias sencillamente me parece inexplicable. El señor Iglesias puede vivir mejor con Rajoy como presidente del gobierno que conmigo", aseguró.
Así, señaló a ambos como responsables de un bloqueo que no han podido romper, reprochando al presidente del gobierno en funciones que "habrá unas elecciones sin que se haya subido a la tribuna para exponer su plan de Gobierno".
A este respecto, señaló que "la desgracia es que el señor Rajoy ha encontrado un salvavidas en el señor Iglesias".
AHONDA EN LA HERIDA DE UNA CRISIS INTERNA EN PODEMOS
Tras insistir en que "vamos a una repetición de elecciones porque Iglesias no ha tenido la voluntad ni el arrojo de llegar a un acuerdo con el PSOE", ha señalado que para él "hay un antes y un después en Podemos", refiriéndose a una crisis interna en su partido.
En este sentido, asegura que, frente al ala de Íñigo Errejón, al que consideró más cercano a las negociaciones con los Socialistas, hay un "ala dura liderada por Pablo Iglesias y Monedero diciendo que 'no' a cualquier tipo de entendimiento con el PSOE".
Por ello, siguiendo con su argumento, Sánchez lamentó: "perdió el ala del señor Errejón en esa crisis interna en Podemos".
"La pena es que hoy Íñigo Errejón no sea una persona de peso en Podemos", sentenció.
NUEVAS ELECCIONES
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Finalmente, en lo relativo a las nuevas elecciones, Pedro Sánchez aseguró que harán primarias y adelantó que se presentará a las mismas. Además, asistirá con el mismo programa y con los mismos candidatos, tal y como comunicó.
Más allá, antes de finalizar su discurso, quiso dar un "mensaje de confianza" y se ha mostrado convencido de que España saldrá fortalecida de esta "encrucijada" y de que "el cambio llegará", aunque tarde dos meses por el parón de una nuevas elecciones generales. "El cambio se aplaza dos meses", finalizó.