Pablo Iglesias pide por carta a los militantes de Podemos "unidad" y no repetir "errores"

Noticias Cuatro/Agencias 15/03/2016 13:49

"Hoy nuestros adversarios nos ponen a prueba al afirmar que hay dos Podemos: uno domesticado y otro radical. No se lo pongamos fácil y respondamos con la belleza y la dignidad que nos es propia", reclama el líder de la formación morada en una carta que ha titulado 'Defender la belleza' y en la que firma como su secretario general pero, "ante todo", como su "compañero".

En la misiva, Iglesias hace un recorrido desde los inicios de Podemos hasta su llegada al Parlamento, una trayectoria en la que, según denuncia, los "sectores oligárquicos" han utilizado "muchos medios" para atacarles, haciendo de la "mentira y la difamación el dispositivo más frecuente" para hacerles "daño".

GUERRA DE DESGASTE

"Todo vale en una guerra de desgaste para instalar el relato de que Podemos y sus dirigentes son, al fin y al cabo, como los demás", lamenta, para añadir que "la tantas veces proclamada división interna de Podemos ha sido agitada con frecuencia en los últimos tiempos en direcciones diferentes".

"Cualquier debate, real o inventado, se representaba como una ruptura letal", apostilla, antes de referirse a continuación al debate abierto la pasada semana sobre las diferencias en la cúpula del partido, a raíz de las diez dimisiones en la dirección de Podemos en la Comunidad de Madrid.

Así, critica que "durante los últimos días" esos "sectores oligárquicos" han tratado de "instalar un nuevo relato" según el cual "existiría un Podemos 'dócil' dispuesto a rendirse y a facilitar la investidura de un Gobierno PSOE-C's frente a un Podemos 'radical'".

"En un momento histórico crucial para el futuro de nuestro país, ponen de nuevo a prueba nuestra madurez y tratan de sembrar cizaña. Por eso es crucial que todos y todas estemos a la altura y no hagamos el juego a nuestros adversarios", reclama.

"DEBERÁN ASUMIRSE LAS RESPONSABILIDADES" POR LAS DIMISIONES

No obstante, el líder de Podemos reconoce que las dimisiones en Madrid --todas ellas de dirigentes próximos a su número dos, Íñigo Errejón, que dieron un paso atrás con duras críticas al líder regional, Luis Alegre, próximo a Iglesias-- "se produjeron en el peor momento posible y han puesto en bandeja el relato que interesa a los defensores del statu quo". "No debemos volver a cometer errores como este y deberán asumirse las responsabilidades", avisa.

"En Podemos no hay ni deberá haber corrientes ni facciones que compitan por el control de los aparatos y los recursos; pues eso nos convertiría en aquello que hemos combatido siempre: un partido más. Debemos seguir siendo una marea de voces plurales, donde se discute y debate de todo, pero sabiendo que la organización y sus órganos son instrumentos para cambiar las cosas, no campos de batalla", defiende.

"NO DEBE HABER CORRIENTES QUE COMPITAN POR EL CONTROL DE LOS APARATOS"

Por todo ello, Iglesias pide a sus militantes no perder la "belleza" que caracteriza, a su juicio, a la formación, y la diferencia del resto, y que consiste en el "brillo en los ojos" y la "pasión", que "está por encima de la habilidad y la capacidad de cálculo" de cualquiera de los miembros del partido.

"Nuestros adversarios no soportan esa belleza. No soportan que nos emocionemos. No soportan que la mujer que --a punto de romper en llanto-- llamó criminales a los banqueros en el Parlamento sea hoy la alcaldesa de Barcelona (en referencia a Ada Colau). No soportan que nuestras sonrisas, nuestros besos y nuestros abrazos sean de verdad", señala.

En esta línea, Iglesias asegura que sus "adversarios" tampoco soportan verle fundido en un abrazo con el cofundador y exdigirente de Podemos, Juan Carlos Monedero, porque no pueden entender que en el partido morado tomen "decisiones políticas, duras a veces" sin traicionarse.

Tampoco entienden, a su juicio, que el hecho de que el ahora líder de Podemos en Aragón, Pablo Echenique, y él defendieran "posiciones diferentes en varios procesos" les haya hecho admirarse y respetarse aún más. "No lo entienden y no lo soportan. Esa es la gran diferencia de Podemos, nuestro brillo; exactamente lo que no podemos permitirnos perder", reclama, en una carta en la que no menciona a su número dos, Íñigo Errejón.

"Un viejo dirigente de la izquierda me dijo una vez: 'Cuando se os ve a los dirigentes en el escenario se nota que os queréis. El cuerpo no miente. A nosotros ya no nos pasa'. Defendamos esa belleza que nos es propia", asegura al final de su carta. "No quiero acabar esta carta con un saludo, sino diciéndoos que os quiero", concluye.