Manel Prat explicó en una entrevista de El Periódico que "aquella noche no se utilizaron pelotas de goma. Estoy convencido de que sin mi autorización, porque así lo establece el protocolo, ningún mosso se ha atrevido nunca a disparar una de estas pelotas".
Ha reconocido que a las pelotas de goma "les queda poco recorrido, muy poco futuro", pero también ha descartado aplicar la moratoria que les propone el síndic de Greuges, Rafael Ribó, porque cree que la policía necesita instrumentos para hacer su trabajo.
Añadió que se quedó "perplejo" cuando descubrió que había un vídeo que contradecía la versión de la Conselleria de Interior en sede parlamentaria, de que no habían disparado en la zona donde resultó herida una mujer que finalmente perdió el ojo, Ester Quintana, pero ha dicho que sigue confiando en los Mossos.
Desveló también que, tras la polémica por las versiones divergentes del caso Quintana, tanto él como otro comisario de los Mossos, al que no nombró; además del relevado Sergi Pla, han puesto su cargo a disposición de Interior.