El Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación ha actualizado sus recomendaciones sobre Malí y ha ampliado a todo el país la alerta por amenaza de secuestros de ciudadanos extranjeros ante la inestabilidad en la que se encuentra inmerso el país tras la rebelión tuareg e islamista en el norte del país y el golpe de Estado del pasado 22 de marzo.
"Existe un serio riesgo de que se produzcan secuestros en todo el país o en determinadas zonas", señala el Ministerio en el apartado sobre Malí de la sección "Países y Regiones" de su página web. El motivo es la "incierta y fluida situación política y securitaria".
Así recomienda "abstenerse totalmente de viajar a este país en las presentes circunstancias" y "aconseja a los españoles, residentes o de paso en Malí cuya presencia no sea indispensable, que salgan provisionalmente del país".
"Debido a la presencia de elementos de Al Qaeda en el magreb Islámico (AQMI) en la región del Sahel, y la presencia de bandidismo, el riesgo de secuestro de ciudadanos occidentales se ha intensificado en los últimos años", explica. Estos secuestros, recuerda el Ministerio, en algunos casos han concluido con el asesinato de los rehenes.
El riesgo de secuestro de occidentales "se estima extremadamente elevado" no solamente en las tres regiones del norte de Malí (Tombuctú, Gao y Kidal) controladas por las milicias islamistas que se aprovecharon de la reciente rebelión tuareg para hacerse con el control de esta zona, sino también en toda la región de Mopti (incluyendo el país dogón, Mopti y Djenné). "Por lo tanto, se desaconseja totalmente el viaje a estas regiones, y se insta a los españoles que se encuentren en ellas a abandonarlas", indica el Ministerio.
Asimismo, se desaconsejan totalmente los desplazamientos a las zonas de las regiones de Kayes, Kulikoro y Ségou, próximas a la frontera mauritana, los viajes por carretera entre Mauritania y Malí, así como entre Malí y Burkina Faso a través de las regiones de Mopti, Tombuctú o Gao. El Ministerio aconseja especialmente extremar las precauciones en la región de Ségou.
En el resto de Malí, incluida la capital, Bamako, es preciso adoptar las medidas generales de vigilancia y autoprotección e insta a cualquier viajero que informe de sus movimientos a la Embajada española en Bamako.