La localización de este depósito es fruto de una intensa investigación efectuada por la Guardia Civil sobre acciones terroristas sin esclarecer y de revisión de casos ocurridos hace años.
Asimismo, las primeras investigaciones apuntan a que el depósito no tiene actividad reciente. Los investigadores barajan la posibilidad de que este zulo hubiera sido utilizado por ETA para suministrar material a algún "comando" que estuviera ubicado en la zona de Irún.
El lugar en la que se ha encontrado el depósito ha sido acordonada y expertos en desactivación de explosivos de la Benemérita han procedido a acceder al mismo bajo la dirección de la autoridad judicial de la Audiencia Nacional.
La operación continúa abierta y no descarta la existencia de otros depósitos en los alrededores.