La titular del Juzgado Central de Instrucción número 3 de la Audiencia Nacional decretó cárcel para Rosell y su presunto testaferro en Andorra Joan Besolí ante el riesgo de destrucción de pruebas, de fuga y de reiteración delictiva y después de que estos prestaran declaración en dependencias judiciales.
La magistrada explicó en su auto de prisión que los investigados formaban una red dedicada a blanquear dinero procedente de comisiones ilícitas derivadas de la venta de los derechos de la selección brasileña de fútbol a una mercantil árabe con sede en islas Caimán, cuya denominación social es International Sports Events (ISE). Todo ello a través de un entramado de sociedades y cuentas principalmente en el Principado de Andorra.
Según relató Lamela, Ricardo Teixeira, en su condición de presidente de la Confederación de Fútbol Brasileño (CBF) firmó un contrato en noviembre de 2006 con ISE para obtener los derechos de 24 partidos amistosos disputados por la selección de fútbol de Brasil. Como consecuencia de esta operación, impuso a la compradora el pago de unos fondos de los que en beneficio propio se apoderaron Rosell y Teixeira en perjuicio de la Confederación brasileña.
INTERMEDIARIO
A fin de dar apariencia de legalidad al cobro de seis millones y medio de euros por parte de Rosell y de 8,4 de Teixeira, se utilizó Uptrend, empresa representada por Rosell para que firmara un contrato con ISE para actuar como intermediaria en la negociación.
El propio Rosell constituyó Uptrend unos meses antes en Estados Unidos aunque sus ingresos y pagos se centralizaban en una cuenta en Andorra y estaba participada por la panameña Fundación Regata, como único socio. Una y otra sociedad carecían de infraestructura que posibilitara la realización de la mencionada actividad económica, siempre según el auto.
Así, se creó un entramado societario a través del cual se dispuso de los fondos y se orquestó toda la actividad de cuentas de Andorra con el objetivo de transferir el dinero que llegaba de ISE a Uptrend hacia cuentas de Teixeira o de personas afines a él en perjuicio de ganancias dejadas de percibir por la Federación Brasileña de Fútbol.
El mismo día que decretó prisión para Rosell y su socio, Lamela tomó declaración a otras tres personas más que dejó en libertad y son la exposa del exdirectivo del club azulgrana, Marta Pineda, el empresario libanés Shane Ohanessian y Pedro Andrés Ramo, cuñado de Besolí.