El vicepresidente de Desarrollo Social y Económico del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y segundo teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha asegurado este jueves que la "complicada" situación política en Cataluña ya ha empezado a perjudicar a la economía de los municipios de la metrópolis de Barcelona.
En declaraciones a la prensa tras un encuentro con representantes del los municipios del AMB para analizar los efectos económicos de la situación política que atraviesa Cataluña, ha reclamado "deshacer las incertidumbres" para mejorar la situación económica, por lo que ha pedido al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, que convoque elecciones.
"No hay datos concretos de afectación sobre la economía local", ha expresado, pero ha insistido en que los comercios venden menos, que los inversores se lo piensan dos veces, y que, incluso, hay algunas empresas que descartan instalarse en Cataluña y, además, ha dicho que esta situación podría tener efectos en la contratación.
MENSAJE DE CONFIANZA
En este sentido, el también líder del PSC de Barcelona ha lanzado un mensaje de confianza a los inversores, empresas y consumidores: "Las instituciones funcionan con normalidad y damos todas las garantías", y ha destacado que es compatible resolver el conflicto entre Cataluña y el resto de España con la actividad económica normal.
La alcaldesa de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), Núria Marin, ha pedido coordinación entre los municipios del AMB para hacer frente a la marcha de empresas, el freno de las inversiones, la bajada en las contrataciones y de la facturación, así como la bajada del turismo: "Es una mancha de aceite que se va extendiendo".
Preguntado sobre si estos hechos obligan a cambiar las políticas de promoción económica del AMB, Collboni ha dicho que se necesitarán entre dos y tres meses para ver como evoluciona la economía local, y ha insistido en que, por ahora, lo más importante es ser prudentes y enviar un mensaje de tranquilidad.