Los grupos municipales de C's, CiU y PP en el Ayuntamiento de Barcelona han pedido de forma conjunta al consistorio que rectifique las licencias provisionales expedidas este pasado martes a cuatro de los 23 locales de los porches del mercado de la Boqueria y han expresado su apoyo a las reivindicaciones de los restauradores.
En declaraciones a los medios, el portavoz de C's, Paco Sierra, ha exigido al Ejecutivo de Ada Colau que las "decisiones que tomen sean las correctas", porque en el caso de las terrazas de los porches de la Boqueria ha regulado un espacio de uso público, pero de titularidad privada.
También ha solicitado que se celebre un pleno extraordinario, que pedirán con el resto de grupos municipales de la oposición, para que se redacte una ordenanza de terrazas en la que "prime el sentido común", se respete el descanso de los vecinos y se regeneré el empleo en la ciudad.
Asimismo, ha tildado de "gestión incompetente" las licencias provisionales que se han emitido, las que, según Sierra, plantean el objetivo que tiene el consistorio de quitar las mesas y las sillas y estar en contra del progreso, de la regeneración de la economía y de la creación de empleo.
INTERRUPCIÓN DE LA REVITALIZACIÓN
Por su parte, el portavoz de CiU, Joaquim Forn, ha criticado que con la retirada de las terrazas se "interrumpe la iniciativa que promovió el Gobierno municipal de Xavier Trias" en el pasado mandato de recuperar los porches para crear puestos de trabajo y revitalizar esta parte del mercado que estaba degradada.
Forn ha comentado que su partido está a favor de que haya una regulación en la gestión de las terrazas, pero ha lamentado que las acciones que se han tomado desde el Ejecutivo barcelonés "hayan sido unilaterales y no consensuadas" con los restauradores y que se haya actuado de un día para otro.
Además, el portavoz de CiU en Barcelona ha informado de que en el mandato anterior habían informes que garantizaban la seguridad en caso de evacuación, y ha pedido que "se reanude el diálogo entre los propietarios de los locales y el Ayuntamiento" para que se encuentre una solución adecuada para que los restauradores puedan seguir con sus negocios.
EN JUEGO ENTRE 50 Y 70 TRABAJOS
La portavoz del grupo del PP, Àngels Esteller, ha explicado que es esencial que continúe la actividad en las terrazas porque ha sido una medida para "combatir el incivismo que había antes" que los restauradores se instalaran en los porches y regeneraran el barrio.
Además, ha recordado que esta actividad económica genera trabajo y que con la retirada de las terrazas están "en juego entre 50 y 70 puestos" y ha criticado que la decisión unilateral tomada por el Ayuntamiento ha tenido consecuencias económicas directas para los comerciantes.
Esteller ha pedido al Gobierno de Colau la restitución de las terrazas, que abra una línea de diálogo con los restauradores y que consensúe con los propietarios la ordenación singular del espacio, pero que mientras tanto "permita que se desarrolle la actividad en las terrazas con normalidad".
UNA MESA EN LA TERRAZA
La propietaria de dos de los restaurantes de los porches de la Boqueria, Oti Pérez-Sanjuan, ha expuesto que con las mesas concedidas en la licencia provisional el "negocio resulta inviable", porque solo le permiten tener una mesa en la terraza.
Pérez-Sanjuan ha criticado que en un año y medio el Ayuntamiento solo se haya puesto en contacto con los restauradores una vez en octubre con la propuesta y que la respuesta al contraproyecto que presentaron los restauradores haya sido "una multa y la retirada de las terrazas por parte de la Guardia Urbana".
Por último, ha informado de que los propietarios presentarán recurso y pedirán la ampliación de mesas en vía pública y ha criticado que "no hayan podido acceder al informe de los Bomberos" según el que, en caso de evacuación, las terrazas supondrían un elemento de peligro para la correcta actuación de los servicios de emergencia.