Al preguntarle los periodistas tras una reunión con el Grupo de Abogacía Joven del Colegio de Abogados de Barcelona (Icab), el ministro ha respondido que hay quien pretende "encontrar en la anécdota discrepancia", ya que el 6 de diciembre es una fiesta española y hay derechos laborales de los trabajadores que no se pueden vulnerar.
Ha asegurado que este día es una festividad de toda España y así está declarada por quien corresponde, por lo que no ve "relevante" si algunos proponen ir a trabajar, aunque sí ha hecho hincapié en que nadie puede obligar a los trabajadores a acudir ese día.
Ha constatado que en esta petición "hay un planteamiento político de hacer ver que el Día de la Constitución para algunos no es una fiesta. Cada uno tiene su planteamiento".
"Hay muchos que vamos a trabajar el día 6. Es un debate que pretende encontrar discrepancia en la anécdota y no en lo sustancial", ha sentenciado.