Mañana está convocado un asedio al Congreso de los Diputados. La Audiencia Nacional va a investigar este llamamiento por si alguno de los convocantes, más radicales que en otras ocasiones, pudieran cometer un delito contra las Altas instituciones del Estado. Los organizadores de la protesta llaman, literalmente, a asediar el Congreso. Incluso animan a ejercer, dicen, la legítima defensa. No habrá pleno, pero sí actividad parlamentaria.
24 horas antes, el Congreso y los diputados se preparan. En el ánimo del presidente de la Cámara, que no se repitan imágenes de incidentes con la Policía.