Gallardón:'Violencia estructural' es "el miedo" de una embarazada "a perder el trabajo"

cuatro.com 08/03/2012 09:57

Las palabras del ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, en respuesta a una pregunta de una diputada socialista en el Congreso, han generado respuestas no sólo desde las asociaciones feministas sino también desde Twitter, donde el hashtag #violenciaestructural se ha convertido en trending topic. La reacción contra sus palabras ha obligado al ministro ha matizarlas.

En una entrevista en El País, Gallardón ha indicado que con ‘violencia estructural’ “pienso en el miedo a perder el puesto de trabajo o a no obtener un empleo como consecuencia del embarazo; pienso en la presión [que sufren] muchas inmigrantes; pienso en mujeres que en este tipo de situaciones [de embarazo no deseado] carecen de apoyos de los poderes públicos para poder libremente optar por una alternativa a la interrupción de su embarazo”.

Para el exalcalde de Madrid, la falta de medidas “de carácter laboral, asistencial, ayudas a la vivienda o al transporte” impide a la mujer decidir “en libertad” sobre su embarazo, explica en el periódico El País. Ha habido “una dejación de los poderes públicos”, que se han “conformado con establecer una despenalización” del aborto, subraya Ruiz-Gallardón.

Desde Twitter, el hashtag #violenciaestructural se respondía al ministro con tuits como “#violenciaestructural es seguir teniendo cavernícolas en gobiernos democráticos”, “#Violenciaestructural es tratar a las mujeres como menores de edad” o “La peor #violenciaestructural es tratar a las mujeres como menores de edad, sr Gallardón”.

Desde la Asociación de Clínicas Acreditadas para la Interrupción del Embarazo (ACAI), recuerdan al titular de Justicia que “son las leyes de aborto penalistas y restrictivas las que obligan a las mujeres a abortar en condiciones inseguras y clandestinas”. Añaden que “los/as profesionales de los centros acreditados apoyan cualquier medida que refuerce la consecución de un embarazo deseado, pero recuerdan al ministro que las únicas iniciativas que frenan la tasa de aborto provocado son la educación sexual, el acceso real a la contracepción y las estrategias preventivas dirigidas a los colectivos más vulnerables. Medidas que, a la vista de sus políticas, no está dispuesto a promover el Ejecutivo popular”.