Un escándalo en Alemania trunca trayectorias políticas

CNN+/Cuatro 27/11/2009 17:10

El ministro alemán de Trabajo, Franz-Josef Jung, se ha visto forzado a dimitir por un escándalo que se remonta a su etapa anterior como titular de Defensa, un cargo que nunca quiso, que desempeñó con secretismos, y que ha acabado costándole su carrera gubernamental.

Cuando hace un mes Jung asumió la cartera de Trabajo y Asuntos Sociales, todo indicaba que empezaba una fase más tranquila en su trayectoria en el Gobierno, en el que entró catapultado desde la política regional y apadrinado por el poderoso barón del estado federado de Hesse, Roland Koch.

Jung ha tenido que dimitir ahora por haber ocultado informaciones relacionadas con el bombardeo del pasado mes de septiembre en Afganistán, ordenado por tropas alemanas y que contabilizó 142 víctimas, muchas de ellas civiles.

Al explicar su decisión, ha afirmado que había decidido dar este paso para no perjudicar a la tropa, cuyo bienestar siempre fue un asunto en el que se volcó "de todo corazón".

No era muy querido ni por los soldados ni por Merkel

Jung nunca llegó a ganarse el afecto de los soldados. Sobre todo de los destacados en Afganistán que se sintieron poco arropados por un ministro que se resistió con vehemencia a utilizar la palabra "guerra" para describir la situación en Afganistán, algo que su sucesor, Karl-Theodor zu Guttenberg, ha hecho nada más asumir el cargo.

Cuando en 2004 la canciller federal, Angela Merkel, nombró a Jung como ministro de Defensa, no lo hizo por elección propia, sino como concesión a los barones regionales de la Unión Cristianodemócrata (CDU).

Jung, de 60 años, era el colaborador más estrecho de Koch, un personaje poderoso dentro del partido y uno de los eternos rivales internos de Merkel.

Nunca se ocupó de lo que hubiera querido

En ese momento, Jung ocupaba la jefatura del grupo parlamentario cristianodemócrata en el estado de Hesse, y su sueño hubiese sido asumir la cartera de Agricultura, un sector que, como viticultor, le resultaba mucho más afín.

Desde 1990 hasta 2000 había sido ministro de la Cancillería de Koch, es decir, era el jefe del gabinete ministerial de ese "land".

Su trayectoria gubernamental ha acabdo estrepitosamente cuando saltó a la luz que la agrupación de la CDU en Hesse tenía un escándalo de cuentas secretas similar al que estaba protagonizando entonces el partido federal, presidido por Helmut Kohl.

Jung ha dimitido porque, cuando se produjeron las irregularidades en la financiación de la agrupación, era su secretario general.

Pese a dimitir, iniciativa tomada para apartar a Koch del punto de mira de la prensa, siempre ha insistido en su inocencia.

El diario 'Bild' ha tirado de la manta

El escándalo ha saltado a la luz a raíz de un informe y un vídeo publicados por el diario 'Bild' en el que se revela que el ministerio de Defensa supo desde un principio que el bombardeo sobre dos camiones cisterna lanzado a comienzos de septiembre en las cercanías de Kunduz había costado vidas civiles.

No ha dimitido sólo

El caso ha hecho rodar ya dos cabezas: la del inspector general del ejército y jefe del Estado Mayor, Wolfgang Schneiderhan, y la del secretario de Estado de Defensa, Peter Wichert.

En su declaración ante el Parlamento, el cristianodemócrata Jung ha reconocido que ese informe existía pero que lo envió a la OTAN sin leerlo ni entregar copia al Parlamento.

Todavía hay más escándalos

Sin embargo, su sucesor, el socialcristiano bávaro y hasta hace un mes ministro de Economía, Karl-Theodor zu Guttenberg, ha anunciado que existen al menos otros nueve informes que habían sido ocultados, cinco de ellos con alusiones a víctimas civiles.

Las nuevas informaciones, que Guttenberg ha presentado ante la Comisión Parlamentaria de Defensa, han sido posiblemente el detonante final que condujo a la caída de Jung.