Fue el pasado mes de diciembre, cuando el actor volvía a recaer en el consumo de dicha sustancia que finalmente le ha llevado hasta su fin. Un fin que al parecer el actor sabría que llegaría tarde o temprano. El portal TMZ.com recoge las palabras que el actor les dijo a sus allegados y que no dejan de ser escalofriantes.
"Si no paro, voy a morir", estas es la frase inquietante que el actor declaró a dichas personas. Podemos deducir que Philip Seymour Hoffman era consciente de la gravedad de su adicción pero ya podría ser demasiado tarde para ayudarle. Y es que según informan algunos medios, el actor poseía en su casa alrededor de entre 50 y 70 bolsas que contenían heroína, cosa que acentúa que la recaída había sido bastante drástica.
Los mismos amigos cercanos al actor confiesan a TMZ.com que Philip habría ingresado de manera desesperada en Alcohólicos Anónimos para tratar sus problemas con el alcohol, pero se sentía frustrado por no conseguir ningún avance. Ya algunas personas confesaban que durante el festival de cine de Sundance, lugar al que acudió el actor a presentar un par de películas, se le notaba que iba muy desaliñado, haciendo levantar alguna sospecha.
Mientras tanto, la policía aún no ha desvelado los detalles de la autopsia de Philip Seymour Hoffman pero todo apunta a una sobredosis como motivo principal de la muerte. Por otro lado el mismo cuerpo está investigando la procedencia de la heroína.
El intérprete deja a medias algunos proyectos como el de Los Juegos del Hambre: Sinsajo Parte 2, donde le quedaba por rodar 7 días para finalizar su trabajo en el film. También deja huérfana a la serie de la cual iba a ser protagonista titulada Happyish, que está pendiente de si finalmente cuenta con luz verde para poder rodarse o se verá en la lista de cancelaciones.