Se trata de una de las dos ampliaciones de capital que la compañía que preside Manuel Manrique aprobó en su última junta general de accionistas para retribuir a sus socios.
Sacyr volvió a remunerar a sus accionistas en 2015, tras suspender el pago de dividendos en 2011. Los principales socios de la compañía son Demetrio Carceller con un 14,7% sindicado con el grupo Satocán, por delante de José Moreno Carretero, que recientemente duplicó su participación, hasta situarla en el 12,8%.
Asimismo, el expresidente y cofundador del grupo José Manuel Loureda, con un 7,8%, el grupo Fuertes (6,2%), el grupo canario Lopesán, que recientemente entró en el grupo al tomar un 2,4%, y el presidente de la compañía, con un 1,8%.