Mariano Rajoy ha hecho balance del año que termina entre los suyos en Toledo. Habla de "dolor y sufrimiento" pero saca pecho y justifica los recortes: "nadie podrá decir que este Gobierno se ha quedados cruzado de brazos". Además, responsabiliza al PSOE de socavar el estado del bienestar y anuncia más reformas y mejores tiempos.