La cifra de negocio del banco toscano, que presume de ser el más antiguo del mundo, pues sus orígenes se remontan a 1472, alcanzó los 933,2 millones de euros entre los meses de enero y marzo, un 21,3% por debajo del nivel registrado un año antes.
Los ingresos netos procedentes de intereses se situaron en el primer trimestre en 457,4 millones de euros, un 16,6% menos que un año antes, mientras que los ingresos derivados de comisiones cayeron un 6,7%, hasta 426 millones de euros.
Además, la ratio CET1 provisional de la entidad ha descendido ha descendido en 1,7 puntos porcentuales respecto a diciembre y se sitúa en el 6,5%.
No obstante, el banco ha destacado que ha conseguido incrementar su nivel de depósitos y cuentas corrientes en 5.500 millones de euros en los tres primeros meses de 2017, en relación con el trimestre anterior.
En el marco del plan de rescate, el Estado italiano inyectará 6.600 millones de euros en la entidad, por lo que el Ejecutivo liderado por Paolo Gentiloni asumirá una participación del 70% en Monte dei Paschi.