El Ibex 35 ha sumado un 0,63% al cierre de mercado y ha recuperado la cota de los 6.600 puntos, con lo que se ha desmarcado de la presión que los inversores ejercían sobre la prima de riesgo española, que alcanzaba los 579 puntos básicos.
El mismo día que el Congreso convalidaba el paquete de recortes para contener el déficit público, la prima de riesgo española seguía instalada en máximos históricos y la rentabilidad del bono español a 10 años superaba el umbral del 7%.
Bankia, que este viernes cumple un año desde su salto al parque, protagonizó el mayor repunte y se revalorizó un 14,05%. La cotización del banco nacionalizado se situó en 0,690 euros, frente al precio de su debut en Bolsa de 3,75 euros por acción.
FCC (+4,64%) y OHL (+3,26%) siguieron a Bankia al frente de las ganancias en el selectivo. Mientras, las caídas las lideraron Acciona (-5,56%) y BME (-2,09%).
Entre los 'pesos pesados' del Ibex, BBVA ganó un 0,81% y Santander sumó un 0,11%. Telefónica se revalorizó un 0,56%, mientras que Repsol avanzó un 0,64% e Iberdrola cedió un 0,45%.
Bankinter, que redujo su beneficio neto un 77,4% en los seis primeros meses del año, se dejó un 0,69%, y eso que la consejera delegada de la entidad, María Dolores Dancausa, garantizó que este año el banco alcanzará 130 millones de ganancias.
En el carril de Europa
Así pues, el selectivo español logró engancharse a las subidas extendidas entre las principales plazas de Europa. Francfort sumó un 1%, en tanto que París ganó un 0,8% y Londres dejó sus ganancias en un 0,4%. Wall Street encaraba su apertura en positivo.
Por su parte, el euro seguía debilitado frente al dólar y fijaba el intercambio al cierre de sesión en 1,2257 'billetes verdes'.
Una cara subasta de deuda
La segunda salida al mercado de deuda del Tesoro español ha sido complicada para los intereses nacionales. En concreto, el interés de la deuda española a diez años llegaba al 7,034 por ciento, lo que ampliaba el diferencial respecto al 'bund' hasta 581,70 puntos básicos, frente a los 573 de la apertura.
Asimismo, la presión sobre la deuda española se hace incluso más visible en vencimientos menores, puesto que el bono a cinco años llegaba al 6,574 por ciento, mientras que la deuda a tres años ofrece un rendimiento del 6,062 por ciento.
A su vez, el interés de la deuda española con vencimiento a dos años escalaba al 5,377 por ciento y el de los títulos con vencimiento a un año llegaba al 4,362 por ciento.
En los últimos días los países rescatados como Portugal e Irlanda han colocado en los mercados emisiones de deuda con vencimientos de entre tres a doce meses a precios inferiores a los del Tesoro Público español.