Así se desprende de las actas de la reunión de noviembre, cuando el (FOMC) decidió mantener los tipos de interés en EEUU en un rango estimado de entre el 0,25% y el 0,5%, donde se mantienen desde el pasado mes de diciembre, a la espera de más datos que confirmen la mejora en la economía estadounidense.
"La mayoría de los participantes expresaron su visión de que sería apropiado incrementar el rango objetivo de los tipos de interés relativamente pronto", reza el texto que subraya que dicha subida debería acometerse siempre que los datos macroeconómicos proporcionen alguna "evidencia adicional" del progreso hacia los objetivos de la Fed, que pasan por el pleno empleo y situar la tasa de inflación cerca del 2%.
Según las actas de la reunión, los miembros del FOMC "generalmente" se mostraron de acuerdo en que el argumento para una subida de tipos continuó "fortaleciéndose". Además, algunos participantes en la reunión de noviembre indicaron que un endurecimiento de la política monetaria de EEUU en el corto plazo contribuiría a "preservar la credibilidad" de la institución.