El resultado negativo del segundo mayor banco alemán entre julio y septiembre refleja el impacto del deterioro de activos en un entorno de bajos tipos de interés, según indicó la entidad, que en septiembre anunció un nuevo plan estratégico, incluyendo un recorte de 9.600 puestos de trabajo y la supresión del dividendo.
Asimismo, la cifra de negocio de Commerzbank en el tercer trimestre alcanzó los 2.437 millones de euros, un 5,2% más que un año antes, tras aumentar un 2,6% los ingresos por intereses netos e intermediación, mientras los ingresos por comisiones bajaron un 5,8%.
Por su parte, la entidad destinó a provisiones 275 millones de euros, una cifra un 88,3% superior a la del mismo periodo de 2015, como consecuencia del "mayor deterioro de los mercados navieros".
De este modo, en los nueve primeros meses de 2016 la entidad obtuvo un beneficio neto atribuido de 96 millones de euros, una cifra un 89,2% inferior a la del mismo intervalo de 2015, mientras sus ingresos cayeron un 7,3%, hasta 7.000 millones de euros.