En concreto, Cepesca considera que es necesario abordar la "delicada" situación de la especie sin poner en peligro una pesquería que en España da trabajo a más de 2.000 tripulantes en 231 buques cerqueros (83 de Andalucía y 148 de Galicia).
El secretario general de Cepesca, Javier Garat, ha señalado que es "esencial encontrar ese equilibrio entre los cuatro pilares de la sostenibilidad: biológica, económica, social y alimentaria, que mejoraría la situación de la especie y permitiría seguir faenando a la flota hispano-portuguesa que pesca en los caladeros del Golfo de Cádiz y del Cantábrico y Noroeste".
La patronal considera adecuada la propuesta del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, de establecer unas posibilidades de pesca de entre 13.500 y 15.000 toneladas en 2018, ya que esta reducción de las capturas respecto a 2017 implicaría una recuperación adicional del 5% de la biomasa de la sardina ibérica.
"Hay que seguir trabajando por la recuperación de la especie y no sólo reduciendo las cuotas. Desde Cepesca apostamos por una gestión basada en el reparto de las posibilidades de pesca entre los barcos, que además sean transferibles, para evitar una carrera por la pesca y permitir que los armadores puedan pescar en los momentos en que sea más rentable", ha señalado Garat.
Por último, Cepesca aboga por una gestión diferenciada por unidades funcionales, separando la gestión del Golfo de Cádiz de la del Cantábrico Noroeste.