El retroceso del volumen total de subvenciones se debe a una caída tanto en la financiación a sociedades mercantiles o de capital, como al resto de entes no mercantiles y autónomos, aunque fue mucho más acusado en las sociedades mercantiles. El 51% de las ayudas y subvenciones fueron a parar a las empresas y el 49% correspondió a sociedades no mercantiles, autónomos y otros entes societarios.
En lo que se refiere a las ayudas a las sociedades mercantiles, el importe fue de 2.076 millones, un 10,3% menos que en 2015, acumulando cinco años consecutivos de caídas y marcando también mínimos de los últimos 10 años. Dentro de estas, las pymes son las que copan la mayoría de los fondos, con un 84% del total, hasta los 1.749 millones, pese a experimentar un descenso del 5%. Por su parte, las grandes empresas registraron 327 millones, con una caída del 31% respecto al año anterior.
Mientras, las sociedades no mercantiles y los empresarios individuales recibieron el 49% de la financiación pública desembolsada, con un total de 1.970,1 millones, un 13,3% menos.
El número de sociedades y autónomos beneficiarios descendió un 21,9% en comparación con 2015 y se situó en 232.260, son 65.000 beneficiarios menos que en 2015. Además, el número de empresas beneficiadas también está en este caso bajo mínimos: cayó un 30,3% en la comparativa interanual, hasta las 42.191.
LOS ORGANISMOS AUTONÓMICOS CONCEDEN MÁS AYUDAS QUE EL ESTADO
Los importes de las ayudas y subvenciones concedidas por los organismos autonómicos superaron a las del Estado por quinto año consecutivo, situándose en 1.190,48 millones, frente a 885,89 millones del organismo central (57,3% frente a 42,7%).
Eso sí, las ayudas autonómicas y locales cayeron un 20,9% en comparación con 2015, siendo el cuarto año seguido de caída. Las ayudas estatales mejoraron un 9,3% en su tercer año seguido al alza.
Por regiones, Madrid es la comunidad donde más ayudas se percibieron en 2016, con 361 millones(-11,2% en tasa interanual); seguida de Canarias, con 313,7 millones (+112,8%) y, en tercer lugar, País Vasco, con 202,7 millones (-6,6%). En el caso de Madrid, el peso del Estado en las ayudas fue el mayoritario, ya que supuso el 62,3%.
La mayoría de las CCAA recibieron en 2016 una financiación inferior a la del periodo 2008-2015, con las excepciones de Canarias y Cantabria. En todo caso, en relación con el PIB, las ayudas y subvenciones públicas solo superaron el 0,5% regional en el caso de Cantabria (0,57%) y Canarias (0,74%), a las que habría que añadir las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla (0,73%).
EL SECTOR SERVICIOS RECIBE LA MITAD
Por sectores, el sector servicios se llevó el 51% de las ayudas públicas a sociedades mercantiles (1.053,5 millones); la industria supuso el 34% (712,7 millones) y agricultura, ganadería y pesca, el 9% (189,4 millones). Los sectores con menor financiación pública fueron la construcción y promoción inmobiliaria (93,5 millones) y el de suministro de agua y energía, con 27,1 millones.
En detalle, la industria manufacturera lideró, al igual que en 2015, más las ayudas públicas, con unos importes de 698,9 millones, que suponen un retroceso del 7,6% sobre el ejercicio anterior. Comercio fue el segundo gran sector, con 226 millones, que suponen una caída del 4,7% respecto a los importes de 2015, mientras que los 189,4 millones de la agricultura, ganadería y pesca implican una mejora interanual del 7,9%.
El sector donde más crecieron las ayudas fue el de hostelería, con 50,17 millones, que suponen un 48,1% más que en 2015; el segundo sector fue el de transporte y almacenamiento, con 36,84 millones (+41,3%). En contraste, los dos sectores más perjudicados fueron el de la industria extractiva, con una caída del 78,5% que dejó los importes totales en 13,81 millones y el de actividades artísticas, con un descenso del 66,9%, hasta los 11,74 millones.
El 23,5% de las ayudas a sociedades mercantiles (casi uno de cada cuatro euros desembolsados) las concedió el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, con 488,63 millones, seguido del Ministerio de Economía y Competitividad, con 272,29 millones; el Departamento de Desarrollo Económico y Competitividad de la Comunidad Autónoma del País Vasco, con 115,14 millones; la viceconsejería de sector primario de la Comunidad Autónoma de Canarias, con 107,67 millones, adscrita a la Consejería de Agricultura, Pesca y Aguas de Canarias, que ocupó la quinta plaza, con 107,52 millones.