La actividad en los servicios portuarios es "nula" (excepto servicios mínimos de seguridad-policía portuaria).
El puerto de Barcelona ha garantizado el "desarrollo normal" del tráfico de pasajeros y de las operaciones que afecten a las mercancías perecederas, peligrosas y correo postal, así como a las mercancías consideradas de primera necesidad con la activación de los servicios mínimos necesarios.
Concretamente en el puerto de la Ciudad Condal los servicios mínimos para información e instrucciones generales a embarcaciones serán de un operador de tráfico portuario, tres remolcadores por turno con su correspondiente tripulación para el servicio de remolque portuario y seis amarradores y un encargado por turno por cada empresa prestadora del servicio en el caso del servicio de amarre y desamarre.