Demuestran que el aceite de oliva virgen puede revertir el daño hepático por dieta alta en grasa

EUROPA PRESS 02/12/2016 13:39

El estudio llevado a cabo por el equipo de investigación de los doctores Francisco Martín Bermudo y Lourdes María Varela Pérez ha permitido evaluar el papel protector del consumo de aceite de oliva virgen extra en la Ehgna, así como analizar los mecanismos moleculares y las vías de señalización implicadas.

Para ello, según un comunicado, han utilizado ratones C57BL/6J que han desarrollado síndrome metabólico al alimentarlos con dietas ricas en grasas saturadas, y una vez desarrollado este síndrome, se les alimentó con dietas ricas en grasas con diferente perfil lipídico y contenido polifenólico, gracias a la presencia de distintos aceites de oliva virgen extra.

Los resultados de este estudio indican que el aceite de oliva virgen extra puede revertir el daño hepático causado por una dieta alta en grasas, a través de la activación de mecanismos anti-inflamatorios en el tejido adiposo y a la modificación de la composición lipídica del propio hígado y las rutas celulares que se activan en el mismo.

El estudio Prosindiol ha sido financiado por el Programa Estatal de Investigación, Desarrollo e Innovación orientada a los Retos de la Sociedad (AGL2014-54585-R).

El trabajo se ha realizado en colaboración con el Instituto de la Grasa (CSIC) de Sevilla, el Instituto de Biomedicina de Sevilla (IBIS), y el Instituto Rowett del Reino Unido. La revista en la que han sido publicados los resultados ('An extra virgin olive oil-rich diet intervention ameliorates the non-alcoholic steatohepatitis induced by a high-fat 'Western type' diet in mice') se encuentra en el primer decil del área Ciencia y Tecnología de los Alimentos (JCR 2015).

Además, la investigadora Lourdes Varela señala que se ha iniciado un segundo proyecto en colaboración con el centro holandés TNO (The Netherlands Organization for Applied Scientific Research), para estudiar los efectos del aceite de oliva virgen extra sobre una etapa más avanzada de la enfermedad de hígado graso no alcohólica (esteatohepatitits o NASH) y la enfermedad cardiovascular, en un modelo de ratones que carecen del receptor para las lipoproteínas de baja densidad (LDL) y que simula las hipertrigliceridemias familiares presentes en humanos.