Penélope Cruz habla claro sobre sus inicios en el cine: "No lo llevé nada bien"

cuatro.com 05/01/2012 13:26

Aunque ahora la de Alcobendas es una oscarizada actriz mundialmente conocida, lo cierto es que sus inicios no fueron precisamente sencillos para ella. Pe se ha sincerado con el diario británico 'The Sun' y ha confesado que sus primeras escenas de sexo con 18 años le causaron un 'trauma' pero, al menos, gracias a ese papel conoció al hombre de su vida, Javier Bardem.

Penélope tenía 18 años la primera vez que se puso delante de una cámara y fue para protagonizar una de las películas más tórridas de la década de los 90: 'Jamón jamón'. En ella protagonizó escenas de sexo salvaje junto a Javier Bardem que dieron mucho que hablar.

Este largometraje supuso un trampolín para su carrera, sin embargo, para Pe no fue algo sencillo. "No lo llevé nada bien. Me provocó un fuerte rechazo a cualquier cosa que tuviera algo que ver con lo sexual o lo sensual. Me corté el pelo a lo chico y no hice ninguna escena de amor, ni tan siquiera con besos, durante varios años", confiesa la actriz.

Pero como toda una profesional, poco a poco volvió a adaptarse a todos las exigencias de los personajes y con el paso del tiempo dejó atrás el tema del sexo y analizó con perspectiva, por eso reconoce: "Ahora me doy cuenta de que Bigas Luna me dio una gran oportunidad y me siento muy agradecida".

Su madre fue sin duda el principal apoyo de Pe para volver a plantearse hacer desnudos y seguir hacia delante con su carrera cinematográfica, por eso no duda en afirmar: "Gracias a ella siempre he disfrutado de ser una mujer y he apreciado lo maravillosas que somos".

Esa película además fue una la primera vez que conoció a Javier Bardem, el hombre que varios años después, ha conseguido robarle el corazón. Y es que para Pe debió ser toda una experiencia coincidir en su primera película con un hombre como Javier, de quien dice: "Siempre he pensado que era uno de los actores más increíbles del mundo".

PENÉLOPE CRUZ HABLA DE SU MADRE: "CONOCE TODOS MIS SECRETOS"

El diario británico ha indagado un poco más en esa relación madre-hija tan especial que existe entre la actriz y su progenitora.

Encarna trabajaba en una peluquería y allí creció Pe, entre secadores y tijeras, una experiencia que no sólo le ha servido para manejarse a las mil maravillas en temas de peluquería sino también para aprender de las experiencias de las clientas. "Hablaban sobre sus matrimonios, divorcios, 'affaires' e inseguridades. Se convirtió en una escuela de interpretación para mí", asegura.

De esas confesiones también aprendió a ser discreta con sus temas, por eso poco o casi nada se sabe de la vida privada de Pe. Tal y como ella reconoce. "Mi madre, por supuesto, conoce todos mis secretos, pero esto es muy distinto de compartirlos con cualquiera. He estado tratando con cotilleos desde que empecé a trabajar y he descubierto que es mejor no hablar nunca de ciertas cosas".