'Escrito en el agua' es un thriller psicológico que propone una reflexión sobre la visión engañosa de la realidad que provocan las emociones y la memoria, y que advierte sobre los daños que las heridas mal curadas del pasado pueden infringir en el presente.
Además, la obra trata cuestiones sociales como el suicidio juvenil, la violencia de género, los estragos de la crisis, la intolerancia o las asfixiantes relaciones de poder en las comunidades pequeñas.
LA MEMORIA NO SIEMPRE ES LA REALIDAD
"Nosotros confiamos desesperadamente en nuestra memoria para construir la historia de nuestras vidas, pero esta recreación de nuestra memoria no necesariamente tiene que ceñirse a la verdad, a la realidad de lo que ha pasado. Ese es el corazón del libro", ha señalado Hawkins, que también ha destacado que ha escrito sobre un personaje "motivado" y "obsesivo", con "una fijación creada en su infancia", que, a medida que pasa la trama, "se obsesiona por encontrar la verdad".
En la misma línea, ha añadido que el libro habla sobre las historias que se cuentan para generar una "identidad" y una "historia vital", y también sobre las personas "que tienen recuerdos erróneos y basan su realidad sobre esos recuerdos".
Además, la escritora ha subrayado que en 'Escrito en el agua' hay un "elenco mayor de personajes" que en 'La chica del tren', y que entre ellos se crea "una especie de coro de voces" y un "gran número de misterios". "Las acciones de unos siempre tienen implicaciones en las vidas de los otros y mezclado con el marco histórico del pueblo se genera un mundo mucho más complejo, mucho más rico que en 'La chica del tren', que tiene un marco de acción más estrecho", ha precisado.
ADAPTACIÓN AL CINE
Sobre la adaptación cinematográfica de 'La chica del tren', Hawkins ha indicado que le gusta "muchísimo" porque es "muy fiel a la oscuridad y claustrofobia del libro" y que Emily Blunt fue capaz de interpretar al personaje "a la perfección" y consiguió "llevar a lo trágico" la interpretación de una alcohólica "sin que pareciera cómico".
Asimismo, ha apuntado que 'Escrito en el agua' tiene aspectos que "son muy cinematográficos" como "la belleza que genera el río", que es "fácilmente imaginable" en la gran pantalla.
Sin embargo, ha explicado que va a ser "más difícil" reducir toda la obra en 90 minutos de película por la "gran cantidad de personajes" que hay y por la "complejidad de la historia". "Eso será trabajo de los guionistas de cine, que se tendrán que despojar de las partes de la historia que consideren", ha dicho.
EL PERIODISMO, UN "ENTRENAMIENTO" PARA ESCRIBIR
Para Hawkins, hay "muchos aspectos" del periodismo que le han servido como "entrenamiento" para ser escritora, ya que ha aprendido a "escuchar cómo habla la gente" y "sobre todo" a saber "lo que oculta".
Por otro lado, la autora ha lamentado que la violencia doméstica, uno de los temas de su historia, sea un "problema persistente en todo el mundo" y que en los últimos años no haya "un cambio a mejor" para solucionarlo. "Si tienes creencias feministas la escritura es un buen medio para que salga. Es un campo en el que las mujeres compiten de igual a igual con los hombres", ha señalado.
Por último, Hawkins ha apuntado que, aunque en "todos" sus libros hay aspectos de ella, no tiene "tanta oscuridad". "La gran mayoría de las cosas las saco de la observación y de la imaginación, no de mi experiencia real", ha concluido.