"Tomarme este tiempo quiere decir que quiero una carrera duradera y un corazón y un alma estables porque eso significará que podré ser el hombre que aspiro a ser, el marido que algún día seré y el padre que me gustaría llegar a ser. He dejado que mis malas relaciones dicten mi forma de actuar y tratar a la gente. He dejado que la amargura, los celos y el miedo conduzcan mi vida", explicaba Justin.
Para poder cumplir con este objetivo, el cantante se estaría apoyando supuestamente en dos de sus exparejas: Selena Gomez y Hailey Baldwin. Según Cordon Press, la que fuera una de las parejas más mediáticas, coincidió el sábado en la Iglesia Oasis de Los Ángeles. Justin salía en su coche con el conocido pastor Chad Lentz mientras Selena dejaba el servicio religioso escondida en la parte trasera de su Range Rover.
Además, aunque su relación no termiara del todo bien, Haley Baldwin ha estado ayudando a Justín tras la cancelación de su gira. La estrella juvenil regresaba al día siguiente a la misma iglesia con una gran sonrisa y allí se podía ver a la modelo, con la que ha coincidido al menos tres veces en esta última semana.