Con una nariz y barbilla postiza y bajo el nombre de Jenny, así se presentó la cantante al casting en el que competiría con sus imitadoras. Ellas no notaron nada, Adele pasaba tan desapercibida que hasta que no comenzó a cantar ninguna comenzó a sospechar.
Al comenzar la actuación Adele fingió sentir nervios y no poder cantar en ese momento. Segundos después sus supuestas contrincantes se quedaban impresionadas su voz y sus caras de sorpresa reflejaban sus sospechas de que estaban ante la mismísima Adele.
Este divertido vídeo ha corrido como la pólvora en las redes sociales y ha logrado ya más de 14 millones de reproducciones en YouTube, una cifra que solo Adele podría conseguir.