El Congreso prorroga el estado de alarma hasta el 15 de enero

Cuatro/CNN+ 16/12/2010 12:20

El Congreso de los Diputados ha aprobado hoy la prórroga del estado de alarma hasta el próximo 15 de enero, con el fin de evitar un nuevo paro en el tráfico aéreo similar al que los controladores de las torres de control provocaron el pasado 3 de diciembre.

El Pleno de la Cámara Baja ha sometido a debate y votación la propuesta del Gobierno de prolongar el estado de alarma durante todas las navidades, que finalmente obtuvo el respaldo mayoritario de los diputados con 180 votos a favor, 9 en contra y 131 abstenciones.

El ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, ha sido el encargado de defender el mantenimiento del estado de alarma hasta mediados de enero de 2011 bajo la atenta mirada del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que ha asistido por sorpresa al debate en el Congreso antes de desplazarse a Bruselas para participar en el Consejo Europeo de esta tarde.

El Partido Popular había anunciado su abstención en la votación. La portavoz del Partido Popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, había anunciado en el debate parlamentario que su formación "no se opondría pero no podía respaldar de ningún modo" la continuación del estado de alarma.

Los controladores

El portavoz de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), César Cabo, ha registrado un escrito en el Congreso de los Diputados en el que el sindicato y el colectivo de controladores plasman un "compromiso de continuidad del servicio" de "casi el 90%", por lo que indican que "prorrogar el estado de alarma no tiene justificación".

"Por parte del colectivo, si el problema somos los controladores, aquí queda patente con esta carta que presentamos hoy en el Congreso que no hay justificación para ese estado de alarma y que se si vota con el ministro de Fomento, José Blanco, "lleva muchos meses retratándose".

"Las personas juzgan quién da un paso al frente y quién demuestra un compromiso ante la sociedad por escrito personal", como han hecho los controladores en la Cámara Baja, ha añadido Cabo, quien ha aprovechado la ocasión para reiterar las disculpas a los usuarios por los perjuicios ocasionados en el puente de la Constitución.

El portavoz de USCA ha asegurado que la voluntad de los controladores es "resolver" un conflicto que ellos "no" han provocado. Cabo ha registrado el escrito el mismo día que el Pleno del Congreso de los Diputados ha de votar la petición del Gobierno para prorrogar el estado de alarma hasta el 15 de enero.

Debate

El pleno del Congreso de los Diputados debatirá y votará este jueves la solicitud del Gobierno de prorrogar hasta el 15 de enero el estado de alarma decretado el pasado 4 de diciembre tras el cierre del espacio aéreo por el 'plante' de los controladores. Aunque previsiblemente la prórroga saldrá adelante, los grupos parlamentarios han tenido hasta las 10.30 para presentar propuestas en las que pueden plantear condiciones o plazos alternativos.

La propuesta del Gobierno la defenderá el ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, ya que el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, viajará poco después del mediodía a Bruselas para participar en un Consejo Europeo, de modo que no asistirá al debate ni participará en la votación.

La prórroga debe ser aprobada por mayoría simple del pleno y, en principio, el Gobierno cuenta con el apoyo de CiU, PNV y Coalición Canaria. El PP no ha decidido aún si lo apoyará o se abstendrá pero, en todo caso, el miércoles pidió al presidente de la Cámara, José Bono, que exija al Ejecutivo información adicional y, en concreto, "cuantos informes jurídicos hayan sido recabados por el Consejo de Ministros o cualquiera de sus departamentos ministeriales" para justificar el estado de alarma.

En el texto que ha remitido al Congreso, el Gobierno alega que la prórroga es necesaria porque "aún hoy no se puede afirmar que el funcionamiento del sistema aeroportuario sea idéntico al de situaciones de normalidad" anteriores, ya que la complejidad de la organización del espacio aéreo "ha sido tan radicalmente alterada" por el sabotaje de los controladores que "está exigiendo y exigirá todavía durante semanas un esfuerzo considerable".

Además, esgrime que la gravedad de lo sucedido, las tareas pendientes para "asegurar la consolidación de la normalidad" en el transporte aéreo y "la alarma social experimentada y aún viva en el conjunto de los ciudadanos impiden que se pueda dar ya por superada la crisis".