El ex presidente de Liberia, Charles Taylor, ha desmentido las acusaciones por crímenes de guerra y contra la humanidad que se le imputan. Lo ha hecho en el Tribunal Especial para Sierra Leona en la Haya.
Su juicio ya comenzó en 2008 por su papel en la guerra civil de Sierra Leona en la que 12.000 personas fueron asesinadas entre 1991 y 2000. Taylor se ha declarado inocente de once crímenes, entre ellos, el asesinato, la violación y el reclutamiento de niños soldado.
Al ex presidente se le acusa, además, de armar el Frente Unido Revolucionario de Sierra Leona, conocido por haber amputado con sus machetes a miles de inocentes a cambio de diamantes. Hay 91 testigos citados por la Fiscalía, todos ellos con las manos amputadas.
En 2003, Taylor abandonó el poder y se exilió en Nigeria. Su arresto y el juicio actual son presentados como el fin de la impunidad, los señores de la guerra africanos.