Seúl incrementa su presencia en la frontera mientras Pyongyang amenaza con nuevas acciones

Cuatro/CNN+ 25/11/2010 09:26

Corea del Sur pretende incrementar su potencial militar frente a su costa occidental, con lo que suspende su plan vigente hasta ahora para reducir el número de tropas de la Marina instaladas en las aguas surcoreanas del mar Amarillo. De esta forma responde a la agresión sufrida el martes por Corea del Norte.

Un portavoz de la Casa Azul (la sede de la presidencia surcoreana), ha detallado que el cambio de estrategia fue acordado en la reunión de emergencia que ha dirigido a primera hora el presidente, Lee Myung Bak.

Esta decisión del Gobierno de Seúl, junto con las nuevas maniobras que llevará a cabo de forma conjunta con Estados Unidos, ha tenido como respuesta un comunicado de Corea del Norte en el que se asegura que llevarán a cabo "un segundo e incluso un tercer ataque sin ninguna vacilación, si Corea del Sur realiza insensatas provocaciones militares otra vez" y que "la artillería de la República Popular Democrática de Corea (RPDC) permanece lista para disparar".

En el escrito, Pyonyang también defiende que fue Corea del Sur quien provocó la agresión y no al contrario. "El enemigo lanzó varios obuses desde un islote próximo al territorio de la RPDC" y explica además que respondió a esta acción "en defensa propia".

Pyongyang rechaza la oferta de diálogo de la ONU

Además, Corea del Norte ha rechazado la oferta de diálogo realizada por el Mando de Naciones Unidas (UNC) en la península coreana, liderado por Estados Unidos, que perseguía rebajar las tensiones entre vecinos, al considerar que "no ganaría mucho con esas conversaciones".

Hace apenas un día, el jefe del UNC en Seúl, Walter Sharp, invitó al Ejército norcoreano a iniciar unas conversaciones oficiales de alto nivel con el fin de facilitar el intercambio de información con el Sur y relajar así la tensión entre ambos países, que ha alcanzado su máximo nivel tras el ataque del martes.

Movimientos de los aliados internacionales

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, llamará en las próximas horas a su homólogo chino, Hu Jintao, aliados de las Coreas del Sur y del Norte respectivamente, con el objetivo de solicitar su colaboración para rebajar la tensión entre ambos países.

Por su parte, el Ministerio de Exteriores de Corea del Surha anunciado, a través de un comunicado divulgado este jueves, que el canciller chino, Yang Jiechi, visitará Seúl en los próximos días. En un principio se planteó como día del encuentro el viernes, pero finalmente se postergó sin fecha concreta debido a problemas con la agenda del ministro.