El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, exhorta a la izquierda radical vasca a "elegir" entre política y violencia, porque las fuerzas de seguridad seguirán persiguiendo a quienes pretendan utilizar los resortes democráticos para defender, apoyar o justificar las bombas, las extorsiones o las amenazas.
Pérez Rubalcaba ha explicado en el Congreso de los Diputados la operación policial desarrollada anoche por orden del juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, en la que fueron detenidos diez dirigentes de Batasuna, entre ellos Arnaldo Otegi, por "intentar rehacer su cúpula".
Formación "ilegal"
El ministro ha recordado que esa formación fue declarada ilegal por una sentencia del Tribunal Supremo, ratificada después por el Constitucional, en aplicación de la Ley de Partidos Políticos, que según el Tribunal de Derechos Humanos se adapta a los principios de una sociedad democrática.
Entre esos principios hay algunos "elementales", reiteró el ministro, como la incompatibilidad de política y violencia en democracia, y por ello, una vez constatado que Batasuna es una parte de ETA, las fuerzas de seguridad han ido desmantelando sus infraestructuras y deteniendo a sus responsables.
La operación sigue abierta a la espera del análisis de la documentación incautada, y los detenidos serán puestos a disposición del juez Garzón.
Los detenidos en Madrid
Ocho de los diez detenidos en Guipúzcoa y Navarra en la operación policial para evitar la reconstitución de la dirección de Batasuna han llegado a primera hora a la comisaría general de Información, de Madrid, para prestar declaración ante la Policía.
Entre los arrestados, que ya están en Madrid, se encuentra el ex portavoz de la "izquierda abertzale" Arnaldo Otegi, el histórico dirigente de Batasuna, Rufi Etxebarria, el ex secretario general de LAB Rafa Díez Usabiaga y la ex tesorera del PCTV-EHAK Sonia Jacinto.
Por otra parte, las tres personas detenidas en Pamplona en la operación policial desarrollada contra el intento de reconstruir la dirección de Batasuna han abandonado ya las dependencias policiales de la capital navarra en dirección a Madrid.