Obama sitúa el empleo como su principal prioridad en 2010

Cuatro/CNN+ 28/01/2010 10:31

Todas las miradas estaban puestas en el primer discurso sobre el Estado de la Unión de Barack Obama, aunque sus palabras eran previsibles. El presidente de EEUU ha basado su discurso en la recuperación del empleo, que lo coloca como la principal prioridad de su Gobierno en 2010.

Para ello, Obama ha instado al Senado a que apruebe "sin dilación" la reforma laboral aprobada por el Congreso, con la que pretende fomentar la creación de empleos en el campo de las energías renovables.

Durante su primer discurso, el mandatario ha hecho una fuerte defensa de las PYMES norteamericanas, ha apostado por un nuevo modelo económico a largo plazo basado en la innovación y se ha mostrado firme en su propósito de reformar el sistema financiero en favor de las familias y las clases medias.

EEUU cuenta con más de siete millones de desempleados en estos momentos, por lo que el presidente norteamericano ha asegurado que "el empleo debe ser nuestra principal prioridad en 2010". Por eso, hizo un llamamiento en favor de la reforma laboral.

A favor de las energías renovables

El mandatario estadounidense ha insistido en la necesidad de apostar por las energías renovables y la innovación, campos en los que "no aceptaré ver a EEUU desempeñando un papel secundario".

Obama ha destacado que tanto China como Alemania o India están apostando por la ciencia, la investigación y las renovables. "Están haciendo fuertes inversiones en energías limpias porque saben que ofrecen empleo".

Ventajas fiscales para las Pymes

Por otra parte, Obama ha propuesto utilizar 30.000 millones de dólares del dinero del plan de rescate devuelto por los bancos para facilitar a las pequeñas y medianas empresas norteamericanas "los préstamos que necesitan para mantenerse a flote".

"También propongo la creación de nuevos beneficios fiscales que irán a parar a las cerca de un millón de pequeñas empresas que contraten nuevos trabajadores o que aumenten los salarios de sus empleados", indicó el mandatario norteamericano. Obama también anunció que eliminará los impuestos sobre los beneficios de las PYMES y ofrecerá ventajas fiscales "a todas aquellas compañías que inviertan en nuevas fábricas o maquinarias".

Congelará el gasto público

Para hacer frente a la crisis, el presidente estadounidense ha reconocido que el país tiene ante sí un "gran agujero fiscal", por lo que va a congelar parte del gasto público durante tres años para tratar de ahorrar 250.000 millones de dólares (unos 176.000 millones de euros).

La medida entrará en vigor a partir del año fiscal de 2011, que comienza en octubre, pero no afectará a las partidas de seguridad nacional, asistencia sanitaria o seguridad social. "Si tengo que forzar esta medida mediante un veto, lo haré", advirtió durante su primer discurso sobre el Estado de la Unión.

La reforma sanitaria

Por otra parte, Obama dedicó tiempo a otro de sus objetivos, la ansiada reforma sanitaria. Asumió parte de culpa por no saber explicar a la población la "compleja" reforma que defiende desde antes incluso de sentarse en el Despacho Oval, pero insistió en que ni el Gobierno ni el Congreso pueden desistir de un debate que está "muy cerca" de dar sus frutos.

En defensa de otras reformas en el ámbito de los derechos sociales, el mandatario también anunció que revisará el trato a los homosexuales en el Ejército.

Sobre Afganistán e Irak

Además, Obama, que asumió la presidencia con dos guerras abiertas, reiteró su deseo de comenzar la retirada de Afganistán en julio de 2011 y replegar las tropas de combate en Irak a finales del próximo mes de agosto.

"Apoyaremos al Gobierno iraquí para que se celebren elecciones, y continuaremos ayudando al pueblo de Irak para que promueva la paz regional y la prosperidad. Pero (...) esta guerra se termina y todas nuestras tropas volverán a casa", añadió.

A su juicio, "quizás la mayor amenaza" para EEUU sea la existencia de las armas nucleares. En este contexto, el presidente celebró el ambicioso tratado armamentístico que ultiman Washington y Moscú y criticó la política seguida por Corea del Norte o Irak, de quienes destacó su "aislamiento" internacional.