España respetará la decisión de la UE sobre escáneres corporales

CNN+/Cuatro 07/01/2010 11:36

El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, ha reiterado hoy que no se implantarán escáneres en los aeropuertos nacionales hasta que la UE se posicione.

En rueda de prensa conjunta con su colega argelino, Morad Medelsi, Moratinos ha reafirmado lo expresado días atrás por los titulares de Fomento, José Blanco, e Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y ha recalcado que España quiere tratar la cuestión "dentro del marco europeo".

Reunión de expertos

Mientras tanto, un grupo de expertos sobre seguridad aérea de la Unión Europea estudia en Bruselas la utilidad de los escáneres corporales en la seguridad del transporte aéreo, según anunció una portavoz comunitaria.

El grupo, formado por expertos de los países comunitarios, debatirá durante todo el día, en una reunión especial, el empleo de estos aparatos y su impacto en el derecho a la privacidad y la salud, según explicó Barbara Helfferich, una portavoz de la Comisión Europea.

La reunión no tomará decisiones, ya que los grupos de trabajo únicamente pueden formular recomendaciones.

Holanda lo implantará

Bruselas ha retomado el debate sobre los escáneres corporales, después de que Holanda anunció su uso en el aeropuerto de Schiphol tras el atentado frustrado durante un vuelo entre Ámsterdam y Detroit (EEUU), el pasado día 25, cuando un pasajero intentó destruir el avión encendiendo un polvo explosivo escondido en su ropa interior. También Reino Unido es partidario.

Helfferich añadió que "la CE considera los escáneres corporales, si cumplen con los estándares de salud y de seguridad, como una herramienta adicional útil a otras medidas de seguridad, si no van contra las leyes nacionales y europeas".

Este tipo de escáner proporciona una silueta muy detallada del cuerpo del pasajero, como si estuviera desnudo. Actualmente no hay normas a nivel europeo que impidan a un país introducir escáneres corporales.

Eslovaquia pide perdón

Mientras, el Gobierno de Eslovaquia ha admitido que fue un error que la policía colocara el pasado sábado explosivos en el equipaje de un pasajero al azar, sin el conocimiento de éste, en una prueba para detectar bombas.

El viajero voló a Dublín y tres días después la policía irlandesa recogió la carga explosiva avisada por las autoridades eslovacas.

Los agentes eslovacos habían depositados varios gramos de hexógeno (RDX) en el equipaje de dos viajeros eslovacos en el aeropuerto de Poprad, a la espera que un perro los detectara, pero el animal sólo descubrió uno de los explosivos.

El policía "se olvidó retirar la segunda muestra de explosivos", constató el Ministerio del Interior en un comunicado, y cuando se dio cuenta, se contactó con el piloto del avión, quien "evaluó la situación como exenta de peligro y decidió despegar".

Eslovaquia ha pedido disculpas a la familia del pasajero y el Ministerio del Interior ha decidido abandonar este tipo de entrenamientos, a pesar de que son una práctica extendida.