Dificultades para rescatar a los mineros atrapados en una mina en Nueva Zelanda

Cuatro/CNN+ 22/11/2010 11:57

El jefe de policía Gary Knowles ha dicho que aún no es seguro que ingresen los equipos de rescate al yacimiento ubicado en Pike River, a la vez que ha admitido por primera vez que posiblemente algunos de los mineros hayan muerto tras la explosión que causó el derrumbe. Hasta el momento no hay señales de vida de los trabajadores que quedaron encerrados, aunque el director de la mina, Peter Whithall, ha afirmado creer que los mineros están vivos.

"Estamos previendo la posible pérdida de vidas como resultado de lo que ocurrió bajo tierra", ha dicho Knowles. La acumulación de gases tóxicos impide avanzar con mayor velocidad en la perforación de un túnel hasta el lugar en que se podrían encontrar los mineros.

Whithall

ha explicado que se está realizando una perforación de 15,3 centímetros en el socavón a través de 162 metros de roca, algo que permitirá que se baje una cámara láser a la mina para comprobar las condiciones y ver si hay señales de vida. La perforación servirá también para tomar muestras de aire para obtener la seguridad necesaria para permitir el ingreso de equipos de rescate.

Knowles dijo que el Ejército ha ofrecido un robot, que se utiliza normalmente para detonar bombas u objetos sospechosos, que llevará una cámara al túnel de acceso de 2,2 kilómetros de la mina cuando se considere que es seguro.

Los trabajadores

atrapados tienen edades comprendidas entre los 17 y 62 años. Entre ellos hay 24 neocelandeses, dos australianos, dos británicos y un sudafricano. Sólo dos mineros lograron salir a la superficie con heridas leves tras la explosión de gas en Pike River, al norte de Greymouth, y contaron por primera vez sus historias a los medios locales.

Declaraciones del primer ministro

El primer ministro de Nueva Zelanda, John Key,

ha asegura este lunes que "hay muchas posibilidades" de que los 29 mineros que desde el pasado viernes están atrapados en una mina de carbón cerca de la ciudad de Greymouth (sur), continúen con vida.

"La información que tengo es que hay oxígeno en la mina y hay muchas posibilidades de que los mineros hayan conseguido llegar a esa bolsa de oxígeno y, por tanto, que estén vivos", ha explicado Key

Desde que se produjera la explosión, no se ha podido establecer contacto con los por lo que en estos momentos se trabaja en la perforación de un orificio de 15 centímetros de diámetro y 150 metros de profundidad por el que se pretende introducir una cámara para comprobar el estado de los operarios.

De forma paralela se estudia la posibilidad de construir un túnel para acceder a la bolsa de oxígeno en la que se presume que estarían alojados. Para ello, en las próximas horas los equipos de rescate enviarán un robot a la mina que se encargará de trazar la ruta más rápida de acceso al refugio.

Las tareas de salvamento se han retrasado debido a los altos niveles de concentración de gases que se han registrado tras el accidente y que podrían provocar una nueva explosión si no se asegura el camino de llegada a los mineros. Por ello, el primer ministro hizo un llamamiento a la calma. "Lo más importante ahora es no hacer un torpe intento de rescate", ha apuntado Key.