El consejero del Interior del Gobierno vasco, Rodolfo Ares, ha afirmado este jueves que tiene conocimiento de que se están produciendo movimientos "en los radicales abertzales para ser un partido legal" en una estrategia marcada por ETA.
"No estoy dando una opinión, conocemos esos movimientos, y las instituciones democráticas, el Estado de Derecho no va a permitir y no puede permitir que el entorno de ETA, con dirigentes de partidos políticos ilegalizados a la cabeza, se conviertan en un partido legal para seguir defendiendo lo mismo que defendían antes de ser ilegalizados: pretender amparar, justificar y dar cobertura a la banda terrorista ETA", ha asegurado Ares en una entrevista concedida a Radio Euskadi.
El responsable vasco de Interior ha considerado que se trata de "intentos de buscar subterfugios, de engaño al conjunto de la sociedad vasca porque no es la primera vez que lo intenta el mundo de ETA", en alusión, entre otros ejemplos, a la candidatura en las europeas de Iniciativa Internacionalista o a la ilegalizada Batasuna.
Ante la posibilidad de que el mundo de Batasuna busque un resquicio legal para poder estar presente en elecciones, Ares ha destacado que ellos estarán "vigilantes" y pondrán todas las informaciones que puedan a disposición de los tribunales, "que tendrán que decidir".
Sin diálogo
Por otro lado, Rodolfo Ares ha aseverado que "no hay ninguna posibilidad de un final dialogado con ETA". "A ETA lo único que le queda por hacer es dejar definitivamente la actividad terrorista y, mientras siga manteniéndola, utilizaremos todos los instrumentos del Estado de Derecho para perseguir a los terroristas, ponerlos a disposición de la Justicia y que respondan de sus crímenes", ha destacado.
Alusiones a Urkullu
El consejero vasco ha calificado de "absolutamente irresponsables" las declaraciones realizadas por el presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, en las que éste asegura que se trata de desalojar a su partido también de los ayuntamientos y diputaciones. "La operación es contra ETA", ha aclarado Ares.
En esta línea, ha rechazado que sea "una operación para que el PNV deje de tener responsabilidades de Gobierno en ayuntamiento o diputaciones" porque "es una operación contra ETA".