Manuel y su mujer Vanesa viven con la amenaza de un embargo. Una estafa y la falta de liquidez les han llevado a deber más de doscientos mil euros al banco. En Cantabria, buscan desesperadamente un comprador para liquidar la deuda “y perder la casa de nuestros sueños”.
Tras la muerte de sus padres, la familia Padilla ha heredado un piso que no pueden mantener. “Es como vender una parte de tu vida, aquí nos criamos”, asegura una de las hijas. Por eso lo venden muy por debajo del valor catastral en pleno centro de Vélez-Málaga.
A un cincuenta por ciento de descuento se vende un palacio de reyes en Gea de Albarracín, Teruel. “No existen edificios como estos” dice Luis, su propietario, quien ahora necesita el dinero porque su empresa pasa por un momento delicado.
Y hasta con incentivos “pago quince mil euros de comisión al que me traiga un comprador de mi local”, señala Hilario. El inquilino a quien tenía alquilado su negocio desapareció dejándole una deuda de más de cien mil euros y ahora no puede hacer frente a la hipoteca.
Nino, ex presidente del Club de Futbol Pontevedra se traslada a Brasil “para sacarse las habichuelas” por la falta de negocio que hay en España. Su chalet de Sanxenxo se ofrece ahora por cerca de la mitad del precio original: “es duro, pero había que tomar la decisión”.
Entre un 12 y un 15 por ciento del mercado inmobiliario se vende con extrema urgencia, según un portal inmobiliario. Todos estos vendedores comparten un mismo objetivo, deshacerse de la vivienda lo antes posible.
“Urge Venta”, es un reportaje de Carlos Cachafeiro.