Tal vez sea por volver a vestir la camiseta de su país o quizá porque se ha impregnado del espíritu del fado en su concentración con Portugal, pero el caso es que Cristiano está viviendo una Semana Santa de lo más nostálgica. A pocas horas de jugar el primero de los amistosos que la escuadra lusa tiene previstos esta semana, contra Bulgaria, el crack del Real Madrid ha tenido tiempo para contarle al mundo que lo que realmente le desvela es la ‘morriña’ por los ‘días de mojito y rosas’ en Marruecos.
Sí, es verdad que apenas hace una semana de aquella escapada, pero es que el tiempo pasa muy deprisa cuando eres Cristiano Ronaldo y vives con un pie en el Rolls Royce y el otro en el jet privado. El portugués saltará al césped de la ciudad de Leiria, a mitad de camino entre Lisboa y Oporto, con el recuerdo en la cabeza del sol y el calor de país africano. Seguro que le durará poco la nostalgia, lo que tarde en ver la pelota pasar por delante y en volverle al colmillo el instinto de goleador que lleva dentro. Hasta entonces, ¿por qué no dejarse llevar por la melancolía y compartirlo con el mundo ‘instagramero’?