Destierros temporales, pícaras estrategias de cortejo, buenas y malas artes, profundas conversaciones... Todo cabe en la idílica isla de “Adán y Eva” cuando son tres dioses quienes la habitan.
El programa, que Cuatro emite el miércoles 18 de noviembre en prime time, trae como invitados a un Adán que se identifica con la belleza, la armonía y la perfección de Apolo; una Eva que cual Afrodita exuda pasión y sensualidad a borbotones; y a otra hermosa aspirante, guerrera como Minerva, que sabrá pelear por su sitio armonioso, de cuerpo apolíneo, simpático e inteligente.
Un hombre con un hermoso cuerpo y una mente más que amueblada. Así se define Gabriel. Gaditano, aventurero, devoto de la mitología griega y entusiasta de la arqueología, Gabriel se hace llamar Apolo por considerarlo su referente intelectual, físico y de personalidad. Cree en la reencarnación y está convencido de que en alguna vida anterior fue un pirata del mediterráneo, un espartano o un cañonero francés.
El nuevo Apolo busca una chica también aventurera, a la que guste la vida loca y que tenga cierta cultura. Sus ruegos no tardarán en ser “divinamente” escuchados y llegarán a él en forma de joven venezolana, a la que no tardará en comparar con Afrodita. Moderna, inquieta y exótica, Esther ha vivido en Nueva York, en Roma, en Milán... y le gusta la libertad por encima de todo. Pero donde hay un dios mitológico hay una guerra fraguándose.
La llegada de una guerrera Minerva, llamada Mireya, inicia una batalla de la que sólo puede salir vencedora una de ellas. ¿Tendrá Apolo su destino amoroso en sus manos o sus diosas decidirán que mejor solas que mitológicamente acompañadas?