Los Merino trabajan y viven como auténticos Shiwiar

cuatro.com 17/05/2012 00:09

Los Shiwiar celebran el consejo más optimista y positivo que hemos podido ver hasta el momento en ‘Perdidos en la tribu’. La familia ha superado el primer impacto del choque cultural y asentadas las bases de la convivencia, disfruta de la estancia en el Amazonas como si de un campamento de verano se tratara: “Cada día os esforzáis más por seguir nuestras costumbres”, asegura el consejo.

El cabeza de familia de los Merino, Carlos, es un gran ejemplo para toda todos. Su forma física le hace estar en desventaja con el resto de la familia, a lo que se suma una gastroenteritis severa, pero con todo, Carlos ha continuado con sus tareas y la tribu ha sabido valorarlo: “Aún estando enfermo has cumplido con tus tareas, y has ido a por el veneno para poder pescar” . Sin embargo, la canoa se le sigue resistiendo, en muestra de lo orgullosos que están de él, recibirá clases del jefe de la tribu.

Víctor y David deberán unirse al firme propósito de la tribu para que aprendan a navegar, pues la cosa se complica. “Víctor y David, todavía no sabéis usar bien la canoa. Para sobrevivir aquí, debéis usarla tan bien como vuestras piernas. La usamos por el día y por la noche, ahora se acerca la luna llena y remaremos para buscar el caimán, debéis acompañarnos”.

Las mujeres de la familia son el orgullo de la tribu, Marisol ha cumplido su castigo y ha recogido la yuca:Nos alegra que hayas cambiado tu conducta, y que, por fin, hayas cargado el cesto de yuca en tu cabeza. Estamos contentos de que hayas trabajado como una Shiwiar, ahora te pediremos que continúes así”. Mientras, Cristina pone el toque de humor a la estancia con sus ‘cachivaches’: “Eres muy trabajadora, siempre ríes y quieres que lo pasemos bien. Has hecho andar por el río a mi marido y eso le ha gustado”.

De esta manera, la familia se sitúa en lo más alto de la pirámide de la adaptación, pero cuidado…los Navarro, prometen.