El kit de supervivencia para una futura DANA, la propuesta en Aldaia para proteger a los más vulnerables
Las medidas de prevención están basadas en experiencias reales de supervivientes de la riada de octubre
Padre e hijo, unidos por un tatuaje del árbol que les salvó la vida durante la DANA: "Pensaba que me moría"
ValenciaEl ayuntamiento de Aldaia, uno de los municipios afectados por la DANA, ha recomendado a los vecinos cambiar su protocolo de prevención de inundaciones. Desde el consistorio proponen tener preparado un 'kit de emergencias'. Las propuestas van principalmente en dos direcciones: contar con algún dispositivo flotante y tener localizada y preparada una 'zona seca'. Desde allí informa en el vídeo Manu Reyes.
Los bajos de los edificios, especialmente aquellos cercanos al barranco de la Saleta, fue donde se registró la mayor pérdida de vidas el pasado octubre. Mucha gente quedó atrapada sin poder salir a flote. Por ello, el Ayuntamiento ha establecido un plan de instrucción ante inundaciones para prevenir y proteger a las vidas más vulnerables.
La primera medida: disponer de una plataforma flotante
"Cuando el agua llega en cuestión de minutos, estas medidas valen para que la gente pueda, de alguna forma, salvarse", afirma José Manuel Vázquez, coordinador de Urbanismo del Ayuntamiento Aldaia. "Una parte de esas medidas es contar con plataformas flotantes. Cualquier cosa que nos haga flotar sirve como colchoneta", añade.
Esta idea se basa en la experiencia de los supervivientes. Amparo y su marido salvaron a su hija, de movilidad reducida, sujetando un colchón flotante contra la pared siete horas. "El agua estaba congelada", recuerda. Ellos estuvieron horas bajo el agua y el lodo para que su hija pudiera mantenerse encima. "Piensas que te ahogarás tú, se caerá la colchoneta y la niña morirá también. Siento horror al pensar en esas familias en las que los hijos se han muerto", se lamenta.
Tener prevista una 'zona seca' puede salvarnos la vida
La búsqueda de una 'zona seca' elevada o la preparación de este tipo de espacios en viviendas es otra de las medidas del plan anti inundaciones. Carlos Catalá, también del pueblo, es uno de los muchos rescatistas improvisados de aquella noche. Salvó una vida de esta forma cargando a una anciana en su espalda. "Nos tiramos por el patio y entramos en su casa", narra. "Ella estaba sujetada a la cortina. Cogimos entre tres y la pusimos en el techo de una casa abandonada. Ahí pasamos la noche", recuerda.
Y es que una 'zona seca', explica José Manuel Vázquez, no es más que "un lugar que está elevado, que sabes que no se va a inundar, al que tú puedes subir fácilmente para esperar el rescate". Es lo que hizo Mónica. Trepó al techado de su terraza, desde donde esperó a que todo se calmase. "10 minutos más tarde y no lo contamos", asevera. Son las historias de vidas que se salvaron. De ellas intentan aprender en Aldaia para evitar muertos si existe una próxima vez.
