La amenaza de la Inteligencia Artificial a algunos oficios: ¿tiene futuro el trabajo de traductor?

Uno de los sectores que más afectado podría verse por la llegada de la Inteligencia Artificial es el de los idiomas y su traducción. Tras estos últimos 15 años, el crecimiento de los motores de traducción automática ha sido exponencial, ya que ahora permiten una traducción simultánea, incluso el doblaje. Ha dado un salto exponencial a raíz de la expansión de las redes sociales, pero por el momento parece que se queda para el ámbito profesional.

Carles Sierra, director IA del CSIC, comenta que los avances son muy rápidos, por lo que van a seguir mejorando la capacidad de traducción. Añade que todavía se mantienen algunas fronteras, ya que aquello que nosotros conocemos por nuestra cultura es muy complicado que los sistemas puedan llegar a traducirlo. También transmite que en las instrucciones de cómo poner en marcha una lavadora, la Inteligencia Artificial si podrá ayudar enormemente a hacer todo esto mucho más fácil.

Moisés Martínez, investigador y desarrollador IA, cuenta que, en una relación de amistad, sentimental o de cualquier tipo con alguien, el hablar en su idioma nativo es algo que la Inteligencia Artificial por ahora y hasta dentro de bastante tiempo no va a poder suplir. Cristina Lillo, traductora, dice que una máquina no entiende de contextos, de ironía, de humor, de sarcasmo. Añade que para una conversación muy básica puede servir, mientras sea una conversación plana.

El peligro de la traducción de la Inteligencia Artificial es que no pase por un filtro humano

Herramientas como DeepL o ChatGPT son capaces de elaborar textos en varias lenguas de manera instantánea y convincente. Se puede percibir la Inteligencia Artificial como una amenaza, pero debe verse como un apoyo a los propios traductores. El peligro real está en la ausencia de revisión, es decir, si el texto generado por Inteligencia Artificial no pasa por un filtro humano, puede dar lugar a problemas de gramática.

Actualmente se produce una diversificación en los perfiles y tareas existentes en el mundo de la traducción y de la interpretación. Hay varios roles que no corresponden con la idea de hacer un uso más social. Como ejemplo de ello están los trabajos de subtitulado de audiovisuales, copywriters, edición y posproducción de traducciones, o gestores de proyectos multilingües.