Pedir una cita médica y luego no acudir le cuesta dinero a la Sanidad Pública y perjudica a otros enfermos. En Andalucía quieren acabar con esta práctica, que es más habitual de lo que parece y a su vez supone que aumenten las listas de espera. Han hecho un llamamiento a los ciudadanos apelando al sentido común y ofreciendo una serie de datos: en un día se pierden 7.600 citas en los centros de salud andaluces, y el año pasado solo en atención primaria llegaron a perderse casi tres millones de citas.
La Consejería de Salud publicó en la red social X el siguiente mensaje: “Si no vas a acudir a tu cita, anúlala. Otro paciente te lo agradecerá. Recuerda, mañana puedes ser tú el que necesite esa cita.” Esta publicación ha provocado que los sindicatos del sector de atención primaria critiquen a la Junta de Andalucía por la mala gestión que hacen del sistema sanitario público y que además estén responsabilizando a los usuarios.
En agosto del año pasado el Servicio Andaluz de Salud desarrolló un sistema de información denominado ‘AviSAS’ al que se puede acceder con la ‘Aplicación Salud Andalucía’. Esta aplicación notifica a los usuarios de las citas para consultas o pruebas diagnósticas y manda un recordatorio cuando la fecha es próxima. Además, tiene la posibilidad de poder cambiar la fecha de la cita o directamente anularla.
La Consejería de Salud está trabajando en el desarrollo de nueva una aplicación que sea similar al anterior sistema para las citas de atención primaria o pediatría, pero todavía sigue vigente el uso de la aplicación que hay ahora o la llamada telefónica. Es necesario tener en cuenta la brecha digital que puede influir en los pacientes más mayores, ya que suelen pedir sus citas por teléfono y si las líneas están saturadas o no saben usar la aplicación terminan por no cancelarlas
Antonio Fernández-Pro, consejero de la Sociedad Española de Medicina General y de Familia (SEMG), cuenta que esta situación es una consecuencia más de las listas de espera, porque la solución no es que un paciente anule su cita, sino que no tenga que esperar unos 15 días para que le atienda su médico. Añade también que la cifra de casi tres millones de citas perdidas no es cierta del todo, porque mucha gente termina yendo a urgencias para resolver su problema.