El Secretario General del PSOE quiso desmarcarse de las afirmaciones que sitúan en el mismo nivel a PP y PSOE en temas de corrupción. Considera que el caso Gürtel y la operación Púnica deberían haber supuesto responsabilidades políticas a Rajoy y otros miembros del Partido Popular, y defiende que en su partido ya han habido responsabilidades políticas para los corruptos, como ha sido en Andalucía y el caso de los ERE.