Antonio se emociona al ver su casa adaptada a su discapacidad: "Esto es un sueño"

"Tener este baño hace que vuelva a tener dignidad"
La vida de Antonio gira en torno a una silla de ruedas debido a un tumor que le secciono la médula y perdió la sensibilidad de cintura para abajo. "Cuando detectaron el tumor me mandaron al servicio de neurocirugía de ciudad real para que me operaran de urgencia. Me tenían que inducir un coma del que podía salir o no. Fueron dejando días y perdí una pierna. Llamé corriendo y me dijeron que estaba dentro de lo normal. Al día siguiente perdí la otra. Ya no sentía ninguna de las dos. Pedí una segunda opinión en otra opinión en otro hospital porque veía que me iba a quedar en una silla", cuenta el paciente a Julio Armas.


El hogar familiar no está adaptado a las necesidades del publicista y cada ves que entra en su casa, las puertas se resienten al no tener suficiente espacio como para que la silla entre sin dañarlas. Además, Raquel tiene que ayudar a su marido perjudicando gravemente su espalda y sufriendo fuertes dolores. Tras pasar un día espléndido en la piscina, el matrimonio vuelve a casa sin imaginarse la sorpresa que el programa les tiene preparada. "Tu primer reto será entrar a casa solo", le indica el doctor a Antonio.

Cuando el paciente cruza de nuevo la puerta de su casa no puede creerse lo que ven sus ojos. El programa ha instalado una serie de rampas con barandillas por las que podrá subir al domicilio sin ayuda de su mujer. "No me lo puedo creer, esto es un sueño, estamos haciendo la casa menos discapacitada como antes. Con estas nuevas adaptaciones en mi casa y en mi vida hoy es un día para marcar en el calendario", exclama con los ojos vidriosos y muy emocionado.

Antonio disfrutaba de largas duchas en el gimnasio ya que este poseía un baño adaptado. A partir de ahora, también podrá hacerlo en su casa ya que el programa también se ha encargado de la reforma del baño. "Lo de la rampa es vital, pero la adaptación del baño hace una cosa muy buena para mí, que es volver a tener dignidad. La familia va a ser totalmente feliz hasta el punto de igual que antes de yo tener la lesión medular. Ahora no hay ninguna barrera en mi vida. Estoy como en una nube, no me creo todavía que pueda ser como una persona normal", confiesa.