Nos hemos colado en la presentación de la décima temporada de ‘Cuarto Milenio’ para hacerle un absurdo obsequio a Iker Jiménez y para preguntarle si alguien de su equipo había dimitido muerto de miedo. “Hubo una chica que trabaja de cámara a la que mandamos a una casa abandonada en la que empezaron a pasar cosas y se largó corriendo”.