El cantante y Jesús Calleja, como parte de su ruta, han decidido hacer una serie de kilómetros en bicicleta. Pero no era todo tan bonito como parecía ya que se han tenido que enfrentar a una gran cuesta llena de gravilla. El cantante ha intentado dar lo mejor de sí mismo, pero no ha podido concluir la prueba. Ante esto, se ha mostrado muy frustrado y enfadado: “Me voy a poner a llorar”.