Auténtico ataque de locura de una mujer que paró el tráfico increpando a los conductores

En cólera, enfurecida y sin parar de gritar y gesticular, una mujer creó un auténtico revuelo en una intersección ubicada en Long Beach, California, EEUU. Aquí, comenzó a comportarse de forma errática, increpando a los conductores que se encontraban a su alrededor, incluido a un policía que se aproximó hasta el lugar en su vehículo.

Un testigo grabó el suceso, en el que se aprecia cómo la mujer no modera su conducta ni en presencia del agente, sino que, al contrario, eleva aún más el tono y sigue paseándose en medio de la carretera sin importarle lo más mínimo el tráfico y el sonido del claxon de los coches.

Ante tal situación, el policía se bajó del vehículo e intento mediar para que la mujer se calmase en repetidas ocasiones. Sin embargo, ésta, lejos de amedrentarse llega a hacer varios amagos en los que parece intentar golpear al agente. Éste, que retrocede ante sus intentos y parece querer rehuir de tener que entrar en contacto para reducirla, finalmente tiene que pasar a la acción, usando su porra para golpearla en las piernas y así conseguir echarla al suelo y detenerla. Incluso, un ciudadano que se encontraba allí se bajó del vehículo para prestar asistencia al policía a la hora de reducirla.

Según informa Long Beach Post, haciendo referencia a las declaraciones de la Policía Local, la mujer fue finalmente trasladada al hospital debido a su estado, y la investigación reveló que se encontraba intoxicada y bajo los efectos de narcóticos.

Así mismo, la Policía de Long Beach destacó la labor de su agente, del que dicen que se vio obligado a usar la fuerza para detener a la mujer y salvaguardar la seguridad tanto de ella como de los conductores, y alabaron también al hombre anónimo que le prestó ayuda antes de que llegasen refuerzos al lugar.

Por su parte, en las redes sociales, donde el suceso se ha convertido en viral tras ser publicado en Facebook, –sumando más de 9 millones y medio de reproducciones–, son mayoría los que alaban la intervención del policía frente a los que la critican. En suma, aplauden que haya intentado por todos los medios no usar la fuerza hasta finalmente emplear la porra en lugar de sacar el Taser o recurrir a medidas todavía más drásticas, como desenfundar o hacer uso de su arma de fuego.