Un trabajador de un establecimiento de Tlalnepantla de Baz, en el estado de México, grabó cómo una mujer utilizó a su bebé para robar unas baterías. A primera vista, parecía que estaba cuidando del pequeño. Sin embargo, la mujer intentó huir y uno de los empleados le pidió que sacara lo que llevaba y extrajo dos baterías por un valor de 250 euros cada una.